El tanatorio del humor negro

El humor negro y algo macabro que sucede en la funeraria Torregrosa tiene el sello creativo de las historias costumbristas de los hermanos Caballero desde los tiempos de la mítica 'Aquí no hay quién viva', con numerosos personajes dentro de una gran coralidad entre los que destaca la presencia como protagonista de Carlos Areces en un personaje que le encaja como un traje hecho a la medida.

La trama: 'Muertos S.L.' utiliza muy hábilmente el recurso inicial de la muerte repentina de Gonzalo Torregrosa, el mandamás absoluto y todopoderoso de la funeraria que lleva su nombre, con cuatro facciones interesadas en el futuro de su sucesión.

El primer interesado es Dámaso Carrillo, el agente funerario y hombre de confianza del fallecido, que era el encargado de buscar negocio, merodeando por los hospitales para captar clientes consternados tras el fallecimiento de su ser querido. Dámaso es un personaje bastante ruin y mezquino, un adulador pelotero de sus superiores y despectivo con sus inferiores, en especial con Pablo un pobre becario que ha caído bajo su tutela.

A un segundo nivel tenemos a la viuda Nieves que vive en sus mundos de Yupi particulares, con su difunto marido en un altar y ajena a todas sus actividades privadas que no eran un dechado de perfección, pero su ingenuidad y ganas de ser buena persona hacen que no deje de ser un personaje entrañable, en especial cuando decide seguir honrando a su marido.

En un tercer escalón tenemos a la segunda generación de los Torregrosa formada por las dos hijas que solo desean vender la empresa familiar para lucrarse ellas e iniciar sus propios negocios, con la colaboración de Chemi, el marido de una de ella, un fantasmón que se vende como un gran experto en marketing y comunicación pero que solo repite las frases y conceptos que trasmiten numerosos gurús de vender aire.

Por ultimo tenemos al variopinto colectivo de los empleados de la funeraria desde el conductor de coches fúnebres hasta el encargado del horno incinerador, pasando por los encargados de maquillar y preparar los cadáveres y las encargadas de la recepción y del bar del tanatorio.

El humor que desarrolla 'Muertos S.L' es de bola por nieve por episodio, con algunas tramas que tienen que ver con los extraños entierros que tienen que gestionar, otras que interaccionan con las vidas personales de los empleados y finalmente las de la propia gestión de la funeraria que acaban confluyendo al final de cada entrega, en una gran explosión divertida.

Sus mejores momentos llegan al ridiculizar ciertos personajes habituales en nuestro entorno real como es el caso del cuñado experto en marketing que solo hace que hundir empresas con sus ideas de bombero extraídas de manuales de emprendedores inútiles

Creador: Aprovechando el éxito de series como 'La que se avecina', los hermanos Alberto y Laura Caballero decidieron crear su propia productora creando 'Machos Alfa' para Netflix,.

Ese éxito les permitió seguir por ese camino buscando alguna historia de humor negro en un ambiente laboral con todas las miserias y mezquindades entre directivos y trabajadores que se generan en una pequeña empresa, encontrando en una funeraria el lugar ideal para impregnarlo de humor muy negro.

Protagonistas: Dentro de la enorme coralidad de 'Muertos S.L.' destaca el impresionante Carlos Areces como el bastante miserable Dámaso.

Además hay que destacar el descubrimiento de Gerald B. Filmore como un raruno y desconcertante tanatopráctico y sobre todo a la gran actriz de Zaldibia Aitziber Garmendia que consigue hacernos reír unicamente viéndola correr de un lado para otro de una forma muy particular, además de robar todas sus escenas, como Olivia la atribulada y enamoradiza recepcionista/contable de la funeraria.