Borrar
El bergaratarra Yon González.
Zinemaldia: Manu Gómez presentará 'Érase una vez en Euskadi', sobre la violencia de ETA, la droga y la crisis económica

Los años de plomo bajo la mirada maqueta

Ópera prima ·

El arrasatearra Manu Gómez presentará en el Zinemaldia 'Érase una vez en Euskadi', sobre la violencia de ETA, la droga y la crisis económica como trasfondo

Jueves, 9 de septiembre 2021

Para estrenarse en la dirección de un largometraje Manu Gómez (Arrasate, 1973) eligió un tema que le resultaba muy cercano, su propia experiencia, su infancia. Sopesó varias alternativas, pero finalmente se impuso la necesidad vital de volver a sus orígenes y «de hacer un homenaje a mis amigos y a esa Euskadi que viví con ellos en los 80». El filme se estrenará en el Zinemaldia dentro de las galas de RTVE.

'Érase una vez en Euskadi', que llegará a las salas comerciales el día 29 del mes que viene, retrocede a mediados de los años 80 y se sumerge en un municipio guipuzcoano –una mezcla de Arrasate, Bergara, Eibar, Elgeta, Elgoibar, Oñati, Soraluze y Zumarraga y Azkoaga en Álava–, en el que viven unos chavales de doce años. Marcos y sus tres amigos José Antonio, Paquito y Toni comparten una herencia común: son hijos de maquetos, aquellos padres que llegaron al País Vasco en busca de un futuro económico mejor, pero que se encontraron con una dura crisis económica y una tensa situación política como fueron los conocidos como años de plomo. «El cine y la televisión tratan esa época cada vez más, pero creo que había una deuda con esa gente que también son parte de la historia de Euskadi», reflexiona el realizador, a quien el tema le toca muy de cerca porque «yo soy uno de esos maquetos que creció en esos años».

Amable y feroz

«Recuerdo los debates sobre si las pelotas de goma de la Ertzaintza eran más blandas porque eran vascos»«Es una historia que habla de los que aprendieron a convivir y lucharon por la integración en la Euskadi de los años 80»

«Nací en Mondragón en mayo de 1973... Soy hijo de inmigrantes granadinos y nieto de aquellos que perdieron la guerra civil», se define Gómez para quien «esta historia es un pequeño trozo de aquella infancia. Una niñez como la de cualquier otro niño, pero con un decorado que tenía la característica de mostrar la Euskadi más feroz». Por eso el realizador, curtido en cortometrajes y en series como 'Seis hermanas' y 'Derecho a soñar', ha elegido un título de cuento para una historia de apariencia amable con trasfondo de terror.

Desde el principio la intención de Manu Gómez fue «hablar de la amistad y de los sueños rotos» porque para él son «acontecimientos cuyo recuerdo se ha implantado en mí tan fuertemente como la necesidad de contarlos». Pero también asegura que nunca quiso hacer «una radiografía sociopolítica de esa época tipo 'Cuéntame'». Optó por focalizar la historia en la inocencia de cuatro niños, «pero, si hablaba de mi vida, no podía dejar de mostrar un escenario sin el terrorismo presente, no estaría contando la historia de aquellos años». Así los chavales pasan las tardes debatiendo, entre otras cosas, sobre si las pelotas que lanza la Ertzaintza contra los manifestantes son más blandas que las de la Guardia Civil. «Porque son vascos», justifica en uno de sus recuerdos más presentes. «Eran nuestros juguetes», comenta para hacer referencia a una manera de demostrar que «en algunos aspectos terribles nuestra infancia no se parecía en nada a la de los niños de otras zonas. En Mondragón, los viernes por la tarde comenzaba el festival y dejaba el pueblo prácticamente en llamas».

No solamente la violencia de ETA se refleja en ese entorno hostil que los protagonistas viven como algo casi normalizado, sino que también toca de forma directa, «porque estaban muy presentes», los estragos de la heroína y el sida que «en mi pueblo arrasaron y se llevaron a mucha gente por delante de una manera rápida y cruel».

Vivencias con sus amigos

Muchas de las experiencias de estos críos las ha tomado Gómez de sus propias vivencias. «Cuando mis amigos vean la película seguramente dirán: '¡Qué cabrón!'». La historia del videoclub –y la estrategia para poder ver una película pornográfica–, es totalmente real. «El título de la pelíucla es casi el mismo, no pudimos utilizar el original por un tema de derechos». Esos cuatro chavales «son el resultado de mucha gente con la que yo conviví». Ahí está el amigo desatendido por su madre y con un hermano yonki, otro al que sus padres torturan cortándole el pelo modelo tazón o el chaval ciclista en el que se refleja el propio director, quien «antes de pensar en ser cineasta quería ser ciclista, pero era muy malo y para mí resultó muy frustrante».

La película también habla de la pérdida de personas cercanas, aceptadas «con una terrible naturalidad cuando se tiene doceaños. Aunque sean dolorosas parece que tienes la obligación de ser feliz. Hay muertes injustas y otras suceden porque la persona se arriesga, bien por la droga o por el terrorismo».

Manu Gómez sintetiza su película como «una historia sobre los que tuvieron que huir, sobre los que se quedaron y, sobre todo, de los que aprendieron a convivir y lucharon por la integración y por la normalización de la convivencia en la Euskadi de los años 80». Porque también presenta la tragedia de «la doble inmigración, de familias que en los años 60 fueron a Alemania y que tras regresar a España con las manos vacías se instalaron en Euskadi».

El reparto es una de las partes más importantes de la película «para darle credibilidad» y los niños juegan un papel fundamental. «Era lo que más miedo me daba», explica Gómez, «porque con los chavales te la juegas». Recuerda que «hubo momentos que en las pruebas surgía la magia y tenía claro que eran ellos». A la hora de dirigirlos esa magia continuó. «No tienen la autoexigencia de los actores adultos, venían a jugar, se lo pasaban bien y transmitían. Había que aprender sus reglas de juego y adaptarte».

Asier Flores, Aitor Calderón, Miguel Rivera y Hugo García están acompañados de actores como Marian Álvarez, Vicente romero, Josean Bengoetxea, Luis Callejo, Yon González o Aron Piper.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco Los años de plomo bajo la mirada maqueta