Evoluciona favorablemente el infartado más grave

Las altas temperaturas del pasado domingo, muy poco habituales a estas alturas del año, fueron otro de los retos a superar por los miles de atletas que disputaron la 57 edición de la Behobia - San Sebastián. «Con estas temperaturas, impropias aquí en los meses de noviembre, estábamos preparados para lo que pudiera pasar», cuentan fuentes cercanas al CD Fortuna conocedoras del despliegue sanitario. «Y en ese sentido se ha cumplido con la previsión», añaden.

La jornada del domingo se saldó con «125 atenciones y unos 33 traslados a centros hospitalarios por diversas causas, la gran mayoría por golpes de calor». Algo lógico en una jornada donde se llegaron a alcanzar los veintiséis grados entrado el mediodía. «A ver si un año podemos disfrutar de una climatología que esté en el término medio, porque a veces graniza y hace muchísimo frío y otras, como hoy –por ayer–, un calor extremo que puede resultar muy peligroso», expresa Enrique Cifuentes, presidente del Fortuna. «De todas formas, la buena coordinación entre DYA, Cruz Roja y Osakidetza ha permitido que todos los casos se hayan quedado en un susto».