San Sebastián
Miércoles, 30 de septiembre 2020, 08:14
La burbuja a punto de explotar y millones de televidentes de todo el planeta que tratarán de olvidar por unas horas el Covid para hablar sobre Kobe y la conjura de LeBron y sus Lakers para dedicarle el título. O de unos Miami Heat ... que han revolucionado el Este e irán al asalto, con valentía y un juego de equipo insuperable.
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Dos estilos de juego bien definidos se miden en los más alto. Los Angeles Lakers contrataron a un entrenador de corte defensivo que destacó en su etapa en Indiana Pacers para ordenar el juego de un proyecto campeón. El manejo del vestuario está a cargo de LeBron. Su liderazgo ha conseguido aunar egos y personalidades variopintas tras el anillo. Una promesa que mira hacia el cielo de Los Ángeles.
Lebron James: El jugador más determinante del planeta que ha llevado a los Lakers a la tierra prometida. A sus 35 años conserva un físico espeluznante y se ha convertido en un líder más creativo que sabe contemporizar sus esfuerzos y amartillar cuando debe. En su motivación, Kobe Bryant.
Jimmy Butler: Es el alma competitiva de los Heat. Forjado a fuego desde una ética de trabajo que le ha llevado a la élite de la NBA. En Miami ha encontrado el acomodo perfecto donde la cultura del esfuerzo ha dado resultados. Ha anotado la mitad de sus puntos en los últimos cuartos.
La piedra angular del proyecto necesitaba a un ejecutor. Anthony Davis es la estrella a la que nutre LeBron. Su sociedad es casi imparable. Con Davis como ala-pívot y con un cinco sacrificado a su lado, los quintetos de Vogel se completan con grandes defensores de perímetro. Si los rebasan, les esperan las torres angelinas para proteger el aro. En ataque, si LeBron lanza las contras el rival está perdido. En estático, si la atención se concentra en los ases, los demás saben esperar abiertos.
Miami Heat desborda pasión y la interpretación del juego del coach Spoelstra es sublime. Ha conseguido una plantilla polivalente y física que cambia en defensa individual con eficacia y proponen defensas zonales que niegan el centro con Crowder, Butler o Iguodala en cabeza. Ases que se encuentran entre los mejores defensores que ha tenido LeBron en su carrera. Tras ellos, un león en la zona llamado Bam Adebayo. En ataque exhiben dinamismo y altruismo. Jimmy Butler es el líder espiritual y el que tomará la responsabilidad, pero no existen jerarquías. El que está solo tira. Da igual si eres el veterano Dragic, el novato Herro o el desconocido Duncan Robinson. A nadie le quema el balón y todos se han ganado el derecho a lanzarlo con su esfuerzo.
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Lo Angeles Lakers
Anthony Davis: El mejor escudero imaginable. Un ala-pívot con manejo de balón que anota de tres, resuelve al poste bajo, juega por encima del aro, corre como una gacela y en defensa es polivalente e intimida. Suma 28,8 puntos con un 57% de acierto en estos playoffs.
Caldwell-Pope: Escolta anotador que se ha ganado minutos por su intensidad defensiva y el temple desde la línea de tres (42%).
Kyle Kuzma: Alero alto y polivalente que anota con facilidad, llamado al estrellato, pero que no ha dado el salto cualitativo.
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Rajon Rondo: Base puro experimentado que toma el relevo creativo de LeBron, lidera y ha sorprendido su tiro triple en playoffs (40,3%).
Markieff Morris: Alero veterano curtido en mil batallas que no se arruga ante nadie. Defiende, rebotea y acierta de tres cuando está abierto.
Danny Green: Un escolta defensor de élite en el perímetro y con un historial de tirador temible que no está acertado en la 'burbuja'.
Dwight Howard: Un pívot dominador en los tableros venido a menos pero con un físico aún fiero para luchar.
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Javale McGee: El cinco puro que acompaña a Davis para labores sucias que ha perdido empuje en el plantel.
Alex Caruso: Base-escolta que imprime intensidad y energía instantánea en pista.
Miami Heat
Bam Adebayo: Pívot poderoso, protector de aro y de gran movilidad. Además de buena mano desde la media distancia posee una visión de juego afilada.
Goran Dragic: El ya curtido base esloveno de 34 años ha rejuvenecido. Máximo anotador (21,7p) de los Heat en playoffs. Una locomotora. Penetra con valentía y tira sin miedo en los momentos calientes.
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Tyler Herrero: Un escolta novato cuyas actuaciones han sido decisivas. Fabuloso anotador que lanza tras bote desde cualquier distancia y capaz de penetrar y absorber contactos. Se fue hasta los 37 puntos contra los Celtics.
Jae Crowdwer: Fornido ala capaz de defender cualquier posición en la cancha, con alma guerrera que contagia adrenalina. Rebotea y es solvente tras la línea de tres.
Duncan Robinson: Uno de los mejores tiradores del momento. Anota desde cualquier posición, sin casi armar el brazo. Su altura ayuda aunque flaquea atrás.
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Andre Iguodala: Uno de los mejores defensores de LeBron, con pedigrí de campeón y que acierta en los momentos más difíciles.
Kelly Olynyk: Pívot de grandes fundamentos y con buen lanzamiento triple que no se arruga en el choque.
Kendrick Nunn: Escolta anotador que en temporada regular sorprendió pero al que las lesiones han sacado del quinteto titular.
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