El Bera Bera se proclama campeón de la liga regular

Es decir, las entrenadas por Imanol Álvarez tendrán el factor cancha a favor en todas las eliminatorias que dispute por el título y ya se han asegurado su presencia en la próxima edición de la European League, segunda competición continental en la que el club desea seguir dando pasos hasta alcanzar la tan ansiada fase de grupos. Asimismo, el Bera Bera podrá utilizar las tres citas que le restan para preparar a conciencia la Copa de la Reina que tendrá lugar en el Martín Carpena de Málaga dentro de un mes.

En un A Sangriña siempre complicado que no pudo ver en escena a Patricia Lima, una de sus referentes, el Guardés salió a morder y, pese a que Arrojeria inaugurase el marcador e hiciera también el gol del 1-2, los aciertos de López, Santiago tras seis minutos de sequía para ambos equipos y Amores voltearon el luminoso (4-2). Fueron minutos de muchas pérdidas y errores de lanzamiento, pero también de paradas tanto de Carratú como de Alice, las más destacadas de las suyas durante el inicio.

Mediada la primera parte, Imanol introdujo cambios y las entradas de Karsten y Etxeberria en pista dieron aire fresco al Bera Bera, que logró una renta de cuatro (6-10) gracias a la notable mejora defensiva y tanto la potencia de la lateral argentina en ataque como la eficacia de la lezotarra desde el extremo. No obstante, las gallegas no bajaron los brazos y un doblete de Santiago recortó distancias (9-10) antes de que Gavilán se hiciera dueña y señora de los seis metros para poner el 10-12 y Cavo con un tiro cruzado el 10-13 al descanso.

Las dianas de Fernandes y Polonio en la reanudación hacían presagiar que el partido podría romperse, pero nada más lejos de la realidad. Porque del 15-19 se pasó al 18-19 con un gol de Carratú de portería a portería y Álvarez tuvo que solicitar tiempo muerto. La defensa necesitaba ajustarse. Y así fue, porque desde el minuto 46:35 hasta el final, el Guardés tan solo marcó dos veces. Así, el Bera Bera aprovechó para correr y disfrutar del triunfo. El corrillo final lo dice todo.