El Bera Bera gana en Elda pese a un fuerte viento en contra

El encuentro en el que Maitane Etxeberria cumplió sus 300 partidos tuvo dos partes muy diferenciadas. La primera estuvo muy reñida, tanto que el marcador se igualó hasta en diez ocasiones en los primeros treinta minutos. Aunque las de Álvarez empezaron mejor, sin extremo izquierdo optaron por el doble pivote, poco les duró el dominio en el luminoso y en el minuto 5 las de Vives se adelantaron y tomaron el mando (3-2). Con un ritmo vertiginoso, el partido entró en un duelo de goles, con la defensa donostiarra sufriendo con la primera línea rival y con apenas un tanto o dos de diferencia. Dos puntos seguidos de Erauskin más un tanto de Arroyo situaron a las donostiarras de nuevo por delante en minuto 23 (13-14). La renta llegó a ser de tres goles cuando Menéndez puso el 14-17 en el luminoso, pero la igualdad siguió siendo máxima y con un gol de diferencia en el marcador llegó el descanso, 17-18.

En la reanudación el Bera Bera salió a por todas, firmó un parcial de 0-3, con los goles de Loidi, Boada y Cavo ampliaron la renta, 17-21, aunque no fueron capaces de romper el choque. María Rodríguez tiró de las suyas hasta ponerlas a uno, 21-22. Fue un punto y aparte de inflexión que las de Bidebieta supieron aprovechar. A Boada y Cavo, muy acertadas se fueron hasta los 8 y 5 puntos, se les sumaron los goles de Menéndez y Erauskin en unos minutos de gran calidad que llevaron a la mayor diferencia del choque, los 5 tantos, 22-27. Pero el Elda no estaba dispuesto a dejar escapar a las guipuzcoanas.

A falta de cinco minutos, la ventaja era de 3, 27-30. Pero el conjunto alicantino no se daba por vencido. Se acercaron a dos y un público enloquecido con la posibilidad de ganar al Bera Bera empujó a las suyas a creer en la remontada. A falta de un minuto se pusieron a uno (31-32), ventaja que sentenció Arrojeria. Vives paró el tiempo a falta de 48 segundos, y el último gol de Cesar no influyó en el resultado final.