Un reto complicado pero no imposible

Haber llegado a los cuartos de final de la segunda máxima competición continental es un premio para el Bera Bera, pero el equipo no se conforma y quiere dar un paso más para alcanzar la la fase final de Graz, del 3 y 4 de mayo.

Las de Bidebieta necesitan ganar al menos de cuatro para poder viajar a Austria. En caso de ganar por tres tantos y empatar la eliminatoria no habrá prórroga y se decidirá el pase directamente desde los siete metros, a penaltis.

El Super Amara plantó cara a las alemanas en la ida y se le escapó el encuentro en los compases finales a consecuencia de su precipitación en los últimos ataques, las intervenciones de la portera alemana Ludwig y el acierto al final de la central Jacobsen. La islandesa es la que dirige al equipo y no duda en asumir la responsabilidad si las dos laterales están bien defendidas.

La catalana Ona Vegué fue la máxima anotadora en el primer partido con ocho goles, cuatro de ellos desde los siete metros. Laetitia Quist, hizo seis, como Andrea Jacobsen y Ogonovszky, la jugadora con mejor anotación en el encuentro del Bera Bera.

«Estamos convencidas de que esta eliminatoria es remontable y vamos a seguir creyendo hasta el final», asegura Arrojeria. Analizado con calma el primer enfrentamiento, la conclusión principal es que la desventaja fue demasiado grande por cómo transcurrió el partido. Con esos tres goles en contra con los que el equipo parte, en el vestuario asumen que el rival puede tener algo más de confianza, pero consideran que Blomberg no es un rival muy superior tras repasar el partido de ida.

«Si no creemos nosotras que es posible, nadie lo va a creer. Lo podemos hacer mejor que el otro día, les podemos someter a más problemas con nuestra defensa sobre todo y que nuestro ataque puede ser más fluido», insiste la central de Usurbil. A su juicio, el Bera Bera debe «tener algo más de paciencia tanto en ataque como en defensa. En ataque tenemos que cuidar más el balón porque ellas aprovechan muy bien las contras. Son goles fáciles que moralmente afectan. Habrá que alargar los ataques».