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«Estaba seguro de que Thibaut iba a ganar el Tour». No lo ha dicho cualquiera. Son palabras de Egan Bernal (Ineos) en la gala de los premios Laureus, el lunes en Berlín. El colombiano acabó ganando en París y Pinot protagonizó una retirada teatral en la etapa 19 a causa de una lesión. Sus lágrimas y un vibrante documental de France Télévisions con imágenes exclusivas del equipo hicieron el resto.
«Pinot se ha convertido en una estrella del rock», ha dado en la diana el mánager del Groupama, Marc Madiot, uno que de dar espectáculo sabe un rato. Su reaparición la semana pasada en el Tour de la Provenza fue un baño de masas. En su equipo creen que el desenlace dramático del Tour ha tenido un efecto redentor en Pinot, que ha vuelto a la competición siendo otro corredor. Ahora se detiene sonriente con los aficionados y atiende con calma a los periodistas, actividades de las que antes huía como gato escaldado.
El escalador francés fue séptimo en la Provenza y se mostró calmado, casi zen, todo lo contrario a su versión volcánica anterior. «Me ha venido bien volver, nada sustituye a las carreras. Estoy tranquilo, he dado el máximo y me han ganado los que estaban más fuertes que yo. No tengo nada de qué lamentarme». Ha notado el peso de la púrpura, su nueva posición en el corazón de los franceses. «No sé muy bien por qué llego más a la gente, pero es cierto que me han hecho sentir que he pasado a otra dimensión».
Este fin de semana corre el Tour de Haut Var (con metas en el col d'Eze y el Mont Faron), pero su primer objetivo de la temporada será la París-Niza (desde el 8 de marzo). En su programa también figuran Volta a Catalunya (desde el 23) y la Itzulia (del 6 al 11 de abril). Al menos, una de las dos.
Sería una extraordinaria noticia que Pinot estuviera en la salida de Eibar, donde se reencontraría con Egan Bernal. El colombiano no oculta que el francés «es un corredor al que admiro mucho. Cada día encontraba la manera de ser más fuerte, y yo le respetaba un poco más. No sé si será el más fuerte en el próximo Tour, pero se ha ganado el respeto por todo lo que ha hecho».
Francia espera al sucesor de Hinault desde 1985 y sueña con que sea Pinot, el hombre espectáculo. Por contra, la figura de Romain Bardet (Ag2r) parece haber perdido tirón popular.
Tom Dumoulin (Jumbo-Visma) informó ayer de que «la semana pasada encontramos parásitos en mi intestino y desde entonces comencé a tomar medicamentos. Me siento mucho mejor ya. ¡Tengo muchas ganas de planificar mi inicio de temporada y mis próximos objetivos muy pronto!» En sus previsiones está la Itzulia.
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