

Secciones
Servicios
Destacamos
benito urraburu
San Juan
Domingo, 3 de febrero 2019, 23:27
El ganador final de la Vuelta a San Juan ha sido el colombiano Winner Anacona. Fernando Gaviria ha ganado dos etapas, Julien Alaphillipe otras ... dos, además de ser segundo, pero la estrella de la carrera ha sido Peter Sagan.
El corredor del Bora es todo un espectáculo, dentro y fuera de la carrera. Han sido legión los aficionados que se han hecho fotos con él, tanto en el hotel, como al principio y al final de la etapas.
Lo más fuerte que ha vivido en la Vuelta a San Juan ha sido conocer la historia de Rosana Mardones, una mujer que habita en la localidad de Río Negro y que se hizo 1.400 kilómetros en coche, junto a su marido y sus dos hijos, para fotografiarse con él y conocerle.
Estuvo sólo unos minutos con el triple campeón del mundo, pero eso fue más suficiente para ella. Cuando su manager, Giovanni Lombardi, le contaba la historia a Sagan, no se lo creía lo que oía.
Rosana Mardones sólo conocía a Sagan por la televisión y por lo que leía de él: «Fue una inspiración para poder superar una depresión. Como afronta el ciclismo y su actitud me animó». Cuando le vió en el hotel del Bono, en San Juan, rompió a llorar y Sagan se emocionó.
Apareció con una camiseta con la efigie del ciclista, un montón de fotos de él en el móvil, una mochila y su mate en la mano. Le preguntó a Lombardi que era lo que llevaba en la mano. Y se lo explicó. Para cumplir sus propósitos, Rosana se gastó todos los ahorros que tenía, con la idea, al menos de poder ver de cerca al corredor.
Sagan le saludo. Le dijo, «hola» y Rosana le abrazó calurosamente. Después de estar con ella tenía que visitar a los niños enfermos en el hospital de Rawson.
También le llamó la atención a Sagan todo lo que llevaba con su figura y su rostro. Estuvieron diez minutos hablando, y Rosana se sintió la persona más feliz del mundo. «Tengo una gran admiración por él, pero no sólo como ciclista. También como persona y como compañero. Es un líder dentro de su equipo y un ciclista muy humilde, algo que destaco mucho», comentó.
Después de todo lo que vio, Sagan se quedó bastante impresionado. Le firmó todo lo que llevaba, se hizo fotos con ella y su familia. Le firmó una dedicatoria especial.
A los 1.400 kilómetros para llegar a San Juan, se unieron los 500 de la etapa Jachal-Valle Fértil. «Es un sueño cumplido. No podía hablar mientras estaba frente a él. Es un privilegio que se haya quedado un ratito a charlar. Me dijo que las fotos irán el museo que posee. Estoy súper feliz»
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Santander, capital de tejedoras
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.