Crono por equipos técnica, rápida y por todo el centro de Barcelona

Barcelona asume este sábado «las mayores alteraciones del tráfico de su historia» –según su alcalde– para acoger el estreno de la 78ª edición de la Vuelta a España, una crono por equipos de 14,8 kilómetros urbana, por todo el centro de la Ciudad Condal. Es un trazado que sigue la cuadrícula de las manzanas del corazón barcelonés, por lo que va uniendo tramos rectos con giros de 90 grados, que marcarán el resultado de la etapa y el primer líder, que se conocerá a eso de las nueve de la noche.

Un total de 18 curvas en ángulo recto jalonan el recorrido, lo que exige técnica a los equipos, para gestionar los giros y no descomponerse a la salida de las curvas y perder efectivos, imposibles de recuperar a la velocidad a la que se va a rodar. Rodadores como Filippo Ganna o Evenepoel pueden marcar el paso.

No hay grandes dificutades, por lo que se prevé un ejercicio de precisión, sin muchas diferencias entre los equipos punteros.

La salida se dará junto al mar y, como es habitual en estos casos, Barcelona venderá su imagen. «Combinando la parte más innovadora de la prueba con la tradición náutica de la ciudad, en el Puerto Olímpico se habilitará una plataforma transparente sobre seis patines catalanes con dos pasarelas de 40 metros, por donde accederán los ciclistas», anuncia el Ayuntamiento.

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