Las cosas, en su sitio

A estas alturas de la Vuelta, en las escapadas se meten siempre los mismos: Van Aert, Soler, Schmid... Las fuerzas mandan. Pero este viernes estaba claro que Woods era el gran favorito porque la llegada era ideal para él. Solo tenía que controlar a Van Aert y a los UAE, que tuvieron mala suerte con la caída.

Yo solía coger muchas escapadas y para ello quedaba en las salidas con ciclistas de otros equipos, sobre todo italianos como Moreni o Faresin, para unir fuerzas. Soler es mucho mejor ciclista que yo, pero el resultado está siendo el mismo. Un año hice todos los puestos del segundo al décimo, menos el más importante.

Landa dio otro paso adelante, quizá en el año que más discreto se le ve. Mas dijo sentirse favorito, pero hablar es fácil. Tendrá que luchar por el podio con el propio Mikel, un agresivo Carapaz, Carlos Rodríguez y O'Connor. Va a haber mucha pelea. Y bonita. El domingo espero el asalto de Roglic al liderato y que deje definitivamente las cosas en su sitio. Quizá no coja aún el rojo, pero dejará la distancia tan cercana que no habrá dudas.

Sobre el papel de Felix Gall con O'Connor, yo he sido gregario. En una Vuelta a España, Zulle reventó y Osa y yo le llevábamos, pero se enfadó porque íbamos demasiado rápido. Cogimos un ritmo muy, muy lento y cuando se callaba un poco o se distraía acelerábamos. Un gregario no tiene que poner el ritmo que él siente, porque así no ayuda, todo lo contrario. Hay que amoldarse, esa es la clave. Demostrar que vas más fuerte que tu líder no es ser un gregario. Lo es quien se sacrifica incluso cuando podría hacer una buena carrera o disputar. No creo que Gall haya hecho muchas veces de gregario y además este viernes pensó en sus opciones en la general, donde está cerca.