Marino Lejarreta: «A partir de aquel año, el ciclismo entró en una nueva dimensión»

– Ha pasado mucho tiempo, pero se sigue recordando aquella Vuelta a España.

– A partir de ese año, el ciclismo fue para arriba, entró en una nueva dimensión. La televisión en directo le dio visibilidad e hizo que se mantuviera. La gente se enganchó a la vistosidad que tiene el ciclismo en televisión.

– ¿Se notaba ese cambio dentro de la carrera?

– Mucho. Yo mismo noté que no tenía nada que ver cómo empecé la Vuelta a cómo la terminé en algo tan sencillo como la firma de autógrafos. Las primeras etapas no firmé ni uno y a partir de unos pocos días no paré de hacerlo. Fue un acontecimiento.

– Hubo tele... y ¡figuras!

– Sobre todo, Hinault. Era un referente mundial, el número uno, y vernos a todos nosotros atacarle y hacerle daño llamaba mucho la atención.

– Los Lagos no es un puerto desgastado por el tiempo...

– No, mantiene su dureza. Sigue siendo un puerto donde se puede decidir una Vuelta.