Prueba superada por partida doble

Había pronosticado que Evenepoel resolvería con éxito las dos jornadas asturianas, que las verdaderas dificultades le llegarán más adelante. Ahora bien, tanto su equipo como él superaron una prueba de fuego. Me impresionó el trabajo de Quick Step el primer día que defendió de verdad el liderato. Y en cuanto al maillot rojo, a ver quién es el guapo que le ataca. Transmite seguridad y ha dado otro pasito adelante. Solo le faltó pasar a la ofensiva. Veo al límite a Roglic, pero no está lejos en la general. Y Mas, después de todas las dudas del Tour, va hacia arriba.

Me descubro ante Jay Vine, autor de su segunda victoria de etapa y de su segunda exhibición. No ataca a 200 metros de la meta, sino a seis kilómetros. Mientras tanto, el landismo vuelve a sufrir.

El recorrido de hoy ofrece mejores oportunidades para un ataque de lejos a cargo de algún equipo, por donde está situado el Fito. Aunque se sube por la vertiente menos dura, es más puerto que San Emiliano y compañía.

Espectacular la subida final de ayer, como las cuevas, las peñas y el túnel con el paso del tren que nos ofrecieron las imágenes de televisión. Sigo descubriendo paisajes inéditos e increíbles en Asturias, donde he estado mucho.

Juan Ayuso y Carlos Rodríguez son corredores que invitan a la esperanza. Por su trabajo para otros en Ineos y por su exhibición en el último Campeonato de España, siento debilidad por el andaluz. Eso sí, tiene menos prensa que el de UAE.