Los ciclistas del Jumbo se han pasado estos días el maillot rojo de líder de la Vuelta el uno al otro en un orden establecido, ... supongo, por la dirección deportiva y por ellos mismos. Es lógico y natural que aprovechen la ventaja y la posición adquiridas gracias a la contrarreloj por equipos, así como la regla del puntómetro, para recompensar a compañeros menos habituados a subir al podio. Imagino que el siguiente será ya Roglic en Laguardia, aunque puede suceder algo curioso. Igual ya no les interesa conservar el primer puesto de la general y prefieren cederlo. Veremos. Lo que tengo claro es que La Herrera, por muy Tercera que lo hayan puesto, romperá hoy el puntómetro.

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Es curioso lo del Jumbo, pero más lo que viví en un Giro de Italia. Los diez integrantes de la escuadra que ganó la crono por equipos salieron al día siguiente con una maglia rosa cada uno. Diez líderes. Uno de los gregarios, en cachondeo, se negó a bajar a por agua para sus líderes. «Sono maglia rosa, io non lavoro», se justificaba. Creo que aquella idea de Torriani no se repitió, ni en el Giro ni en ninguna otra prueba.

También entregó el Giro otra maglia rosa que no se enfundó un corredor, sino un mecánico. Organizaron una competición para premiar al que cambiaba antes una rueda. La ganó un componente de nuestro equipo, Caja Rural, en concreto Perico Navarro, a quien Jose Kruz Mujika cedió los honores para el torneo en cuestión.

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