De Países Bajos, a bajista

Me dio tiempo a ver tanto la etapa de la Vuelta como los partidos de pelota de Zarautz, donde como buen bajista que soy me habría llegado para tomarme y café y un güisqui. Asiduo de Galarreta en su día, me tocó vivir el cambio de la peseta al euro. No digo que fui el inventor de la media postura, pero sí uno de sus precursores.

Es una Vuelta que me está ayudando a culturizarme. Superada la asignatura de Holanda, la etapa de mañana llega a Laguardia, que entre otros recuerdos me trae el de mis tiempos de comentarista de ciclismo en Euskal Telebista. Era una Itzulia y no me salía Biasteri, la denominación en euskera de esta preciosa localidad de la Rioja Alavesa. Como solución, Xabier Usabiaga me recomendó acordarme de 'bi asto' antes de decir Biasteri. Funcionó. La cuestión es que con lo que me costó aprender la palabra, resulta que ahora Laguardia posee un sinfín de nombres, algunos hasta del año 1000.

Los ciclistas pasaron ayer un puerto de 25 metros de altitud catalogado de cuarta categoría. Supongo que mediaban intereses comerciales. Y resulta que La Herrera, de algo más de 1.000, puntuará de tercera. Con lo que me ha tocado sufrir en sus rampas por ambas laderas. Será de tercera, pero estoy seguro de que ningún sprinter va a pasar ese puerto con opciones de victoria. Como candidatos al triunfo me inclino por Evenepoel, Roglic, Alaphilippe según su rol e incluso Valverde y Landa.

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