
A. G.
Viernes, 11 de julio 2014, 01:28
Viven en las antípodas de nuestro país, pero aún así no dudan en volver año tras año a la Donosti Cup. Ni siquiera las 24 horas de viaje que se pegan entre pecho y espalda les echan para atrás, como reconoce el director de la academia Coerver de Australia, Adrian Haynes. «Hemos viajado por todo el mundo y hemos estado en torneos similares en Estados Unidos, Japón, Inglaterra y España, pero en ciertas categorías, como las de 12 y 16 años, la Donosti Cup es el mejor torneo del mundo», destaca.
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«Y no sólo por el fútbol y la cultura que tenéis en este país, sino también por cómo está organizado todo y por el gran recibimiento que siempre tenemos de toda la gente con la que nos cruzamos. Por eso estamos muy contentos de seguir viniendo, ya que es una experiencia fantástica para todos los chavales».
Uno de los principales objetivos de la escuela es que los jóvenes hagan deporte. «No traemos equipos al torneo, sino personas que se juntan aquí para jugar a fútbol. De hecho, uno de los grupos no tenía jugadores suficientes para completar un equipo y han jugado con gente local y de Estados Unidos. ¡Se han hecho muy amigos! Esto es lo importante. Con que ganen algún partido y metan algún gol nos quedamos satisfechos, y como este año ha sido así, estamos más que contentos», reconoce.
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