Ochotorena: «Me fui de casa al Real Madrid con quince años y aún sigo en el fútbol»

Es una persona muy callada. Un estupendo profesional en opinión de los que han trabajado o trabajan a su lado. José Manuel Ochotorena (Hernani, 1961) es el preparador de porteros del Valencia y de la selección española. Se fue al Real Madrid en plena niñez y después de defender la portería de varios clubes sigue vinculado al fútbol. Le quedó la pena de no poder jugar en casa.

- ¿Cómo le va la vida?

- Continúo con lo que desde muy chaval fue mi ocupación, el fútbol. Después de jugar pasé a entrenar a porteros en Logroño, luego en Valencia. Me fui con Benítez al Liverpool y volví a Valencia donde sigo, además de la selección... Ese es el camino que sigo a grosso modo.

- No corra tanto, que hay cosas bien interesantes en esa trayectoria. Era un crío cuando emigró de Hernani

- Sí. Me fui a Madrid con quince años y fiché por las categorías inferiores del Real Madrid.

- Una marcha muy temprana

- Pues sí. Ahora que soy padre reconozco lo mal que tuvieron que pasarlo mis aitas al verme marchar tan pronto. Además en aquellos tiempos. Irte a Madrid parecía que era irse al otro lado del mundo, porque no existían las facilidades de todo tipo que hoy tenemos para movernos. Creo que fue Arakistain el que me siguió en el torneo de Atsegindegi, donde jugaba con el Elizatxo, o en Txantxilla con el Hernani y me recomendó al Real Madrid. De hecho en mi ficha figuró como procedencia la del Hernani. Para nosotros jugar el torneo de Atsegindegi era casi como jugar en el Camp Nou o el Bernabéu. Era nuestro gran escenario. Venían equipos de Urnieta, Billabona, Andoain, además del propio Hernani. Me aventuré, por la pasión de jugar. Hice una prueba en el Madrid y así se me abrió una profesión de larga duración.

- Gipuzkoa, gran cantera de porteros y los dos últimos de la Real sudamericanos. ¿Le sorprende?

- Son los cambios que se dan en el fútbol. La evolución ha sido muy grande, no sólo en la portería. Antes, los porteros, por ejemplo, no podíamos utilizar casi los pies y ahora es imprescindible. Es verdad, pese a todo, que sorprenda después de los grandes porteros que ha habido siempre en Gipuzkoa.

- Tantos que exportábamos...

- Claro. Urruti fue traspasado al Espanyol, Esnaola se fue al Betis, Artola, que jugó luego muchas temporadas en el Barça, Irazusta, que estuvo tiempo en el Zaragoza... Porteros guipuzcoanos había muchos y todos ellos de una gran calidad.

- ¿Por qué portero y no delantero que eran más escasos?

- No lo sé. Quizás la inconsciencia de querer imitar a Iribar, que estaba en la selección entonces. Luego Urruti, Arconada, ese tipo de portero que te gustan y quieres intentar ser como ellos. Eran los referentes en que me fijé.

- Hace falta ser bueno y estar en el sitio en el momento justo.

- Eso es verdad. Todos hemos tenido unos inicios y hemos jugado al fútbol, pero es necesario estar en el momento preciso para que puedan darte una oportunidad. La constancia y el trabajo es fundamental para superar los retos, pero también hace falta esa pizca de suerte.

- Porque su primer partido en el Madrid fue por una huelga de los mayores...

- Así fue. Hace unos días fue el aniversario de mi debut, en 1982, en el campo de Castalia, donde le ganamos 1-2 al Castellón. Fue por una huelga de jugadores y los clubes presentaron a los filiales. Yo estaba en el Castilla y jugué mi primer partido en Primera. Fue mi debut, del que tengo buen recuerdo.

- Dos temporadas después le toma el relevo a Miguel Ángel...

- En la temporada 84-85. El Madrid es una entidad que marca mucho, sobre todo a los que éramos de fuera y que llegabas desde las categorías inferiores... Son retos que vas superando y ser el portero del Real Madrid ya es un logro. Compartí puesto con Agustín y ganamos aquella Liga. Al final de la misma nos comunicaron que venía Buyo desde el Sevilla y se fueron cerrando las oportunidades de jugar. Había que buscar otros destinos para intentar seguir jugando.

- Se decía que Buyo tenía gran poder mediático, ¿Algo que Ochotorena no fomentaba?

- Al final de la carrera siempre analizas en lo que has podido fallar o te ha faltado, pero nunca me he sentido fuera de lo que era mi personalidad. Cada uno se manejaba como podía y estoy satisfecho de lo que yo he conseguido en mi carrera con mi forma de ser.

- Y rumbo a Valencia en 1988...

- Sí, fue una de las opciones que se barajaron y el club que más insistió. Me costó salir de Madrid, pero aún era joven y tenía ilusión por jugar. Acepté su oferta.

- A partir del 92 picotea en varios equipos para acabar...

- Firmé tres años por el Tenerife y estuve dos, pasé al Logroñés, donde tuvimos un descenso y terminé en el Racing de Santander. Ya empecé a valorar que las ofertas ya no eran tan atractivas. Además, tuve una lesión de rodilla y lo dejé con 36 años. Aunque el último tuve ficha de jugador, pero mi misión era entrenar a los porteros del Logroñés. Ahí empecé con este oficio, al que me sigo dedicando en el Valencia y con la selección.

- Tengo recuerdo de verle sufrir una conmoción cerebral en un partido contra la Real...

- Fue con el Logroñés, tuve un choque con mi paisano Luis Pérez, casualmente. Era un balón dividido y chocamos. Me tuvieron que hospitalizar... Se quedó en una anécdota, aunque ya fue casualidad que tuviera que ser contra la Real y con otro chico de Hernani, los dos únicos del pueblo que por entonces jugábamos en Primera. Conste que me llevé la peor parte, pero no hubo ninguna intencionalidad de Luis por hacerme daño.

- ¿Le quedó la pena de no haber jugado en la Real?

- Hombre, siempre lo he pensado, me hubiera hecho mucha ilusión. Iba al viejo Atocha y veía los partidos allí cuando era un niño. Eso es lo que te queda en la retina, pero no se dio esa posibilidad, aunque reconozco que me hubiera hecho mucha ilusión. Es el equipo de mi tierra y siempre le he tenido una gran simpatía.

- Debutó con la selección...

- Tuve esa suerte también. Fui seleccionado para la fase de clasificación del Mundial del 90 y acudí a bastantes eliminatorias. Debuté en A Coruña y también estuve contento por ello. Era la época de Zubizarreta y para mí fue otro logro profesional. Aunque después de ese Mundial se acabó esa opción.

- Siempre dejó buena imagen...

- No me puedo quejar, porque mi trayectoria después de colgar las botas es reconfortante. Había coincidido con Rafa Benítez como jugador en las categorías inferiores del Real Madrid, nos conocíamos y tuvimos una buena relación. Coincidimos de nuevo cuando volví a Valencia a entrenar a los porteros y después de los buenos resultados de las ligas del Valencia más la UEFA y al final de su última temporada tuvo un desencuentro con el club. Decidió salir y me propuso ir al Liverpool, todo un reto que también fue precioso. Otra experiencia muy enriquecedora.

- Coincidió con Xabi Alonso...

- Exacto. Y con Pako Ayestaran. Estábamos varios guipuzcoanos. Con Xabi hice una buena amistad y mira lo que es ahora...

- Paco es ahora su jefe...

- Es verdad. Pako Ayestaran era el preparador físico con Rafa Benítez y coincidimos en aquella época. También estuvo en el Valencia con Unai Emery y ahora es el primer entrenador. Nos entendemos bien porque nos conocemos mucho y siempre sabes lo que quiere. Para mí ha sido un reencuentro fácil, porque es una persona que conozco desde hace muchos años y hemos trabajado juntos.

- Mestalla es difícil cuando no salen los resultados...

- Es verdad, estamos en una temporada difícil. Al final no se han cumplido los objetivos que se habían marcado de disputar la Champions y en un club que aspira a retos más altos estar en la situación que estamos siempre acarrea dificultades y problemas.

- Entre el trabajo de los clubes aparece la selección...

- Estaba Julen Lopetegui con los porteros cuando Iñaki Sáez era el seleccionador. Julen fichó por el Rayo y me recomendó. También fue una muy buena ocasión para mí... Estaban Iker Casillas, Cañizares y empezó también Pepe Reina... Y ahora llega De Gea. Está llamado a ser ese portero que marque otra época en la selección. Empezamos con Iribar, luego con Arconada, Zubizarreta y Casillas... Siempre ha habido un portero de referencia y De Gea está llamado a ser el siguiente. ¿Me preguntas por Casillas? Mantener ese nivel suele ser muy complicado, pero sigue ahí aunque ha salido del Madrid. Tiene mi respeto y admiración hacia lo que ha representado en el fútbol.