
Beñat San José: «Ahora tengo que ver cuál es el siguiente paso en mi carrera»
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Entrenador profesional de fútbol. Ha ganado títulos en Chile, Bolivia y ArabiaCon solo 41 años ya sabe lo que es trabajar en seis países distintos. Y haciendo lo que más le gusta, además: ser entrenador de ... fútbol. A Beñat San José (Donostia, 1979) el gusanillo por conocer mundo le entró en 2012, y desde entonces no ha parado quieto. Tras dar un salto cualitativo en su carrera cosechando éxitos importantes en Sudamérica, las últimas dos temporadas le han servido para darse a conocer en Europa, con el KAS Eupen belga. Ha decidido concluir su ciclo allí, y ahora busca un nuevo reto. Tiene hambre de más.
- Se encuentra ahora en casa. ¿Toca reflexionar?
- Sí, llevo ya unos días en Donostia. Tranquilo, satisfecho con el trabajo realizado en Bélgica. Hemos hecho la mejor campaña de la historia del club. En efecto, ahora es momento de descansar y pensar, con calma, en este ciclo de dos años en Bélgica. Para mí es importante poder parar y respirar.
- Le noto con la conciencia tranquila.
- Es que me he ido del KAS Eupen con una sensación muy redonda. He cumplido mis dos años de contrato, he alcanzado los objetivos del club, y llegados a este punto, he decidido que nuestros caminos se separen. Aún así, la relación con el club es fantástica. Estas dos campañas en el campeonato belga han sido muy enriquecedoras, he crecido mucho como entrenador.
- ¿Le costó cambiar Sudamérica por Europa?
- No, pero quiero subrayar que era un gran reto. Llevaba ya varios años entre Bolivia y Chile, haciendo buenas temporadas, y entrar en una liga potente y compleja como la belga... como digo, fue un gran desafío vital y profesional.
- Y ahora, ¿qué?
- Insisto: calma, tranquilidad, reflexión. No tengo ninguna prisa por dar el siguiente paso. Tengo que ver mis opciones, qué movimiento puedo hacer ahora en mi carrera. El mercado aún no está en ebullición. Hay que estudiar también qué otras perspectivas puedo tener en otros lugares, quién sabe si en el fútbol belga de nuevo...
- ¿Y si le llaman de Francia o Inglaterra?
- Sería dar un paso más en mi carrera. España también sería otra posibilidad atractiva. Yo soy ambicioso, cuanto más grande sea el club mejores jugadores habrá, mejores infraestructuras... Me gustaría verme en un reto así, pero repito, no quiero apresurarme. Quiero escuchar todas las propuestas que pueda haber, para mí es muy importante sentir que puedo dejar huella allá donde vaya. Que sienta que soy capaz de conseguir los objetivos por los que me contratan. Eso me entusiasma.
- A principios de año llegó a sonar su nombre como futuro seleccionador de Chile.
- Sí, sé que hubo rumores fuertes. Hasta donde yo sé, en la federación valoran mucho mi trabajo y estuve en la lista de candidatos, pero a mí nadie me llamó, y en ese momento estaba trabajando. Hay otras selecciones que sí me han llamado, pero no era el momento.
- (...)
- También he tenido opciones de dirigir a nivel de clubes en Brasil, que es una liga que me parece fortísima. No me costaría volver al fútbol sudamericano, porque es puro, hay mucho talento y también trabajas con presión. Te curte mucho. Pero ante igualdad de condiciones, creo que me inclinaría por Europa. En parte por la cercanía de casa. Ya veremos qué pasa en el futuro, yo no cierro ninguna puerta.
- Tiene el currículo de un técnico veterano, pero por edad es uno de los más jóvenes.
- Creo que tengo un recorrido ya considerable a mis espaldas, y eso me hace estar satisfecho con mi trabajo. No ha sido fácil, detrás de todo lo que he logrado hay una cantidad ingente de horas de estudio y análisis. Muchísima dedicación, porque esta es mi pasión y mi trabajo. Puede ser que mi perfil sea inusual, sí. Pero la satisfacción no es suficiente, quiero más. Tengo la confianza de que puedo dar otro salto más.
- Y antes de ir a Arabia Saudí, Emiratos Árabes, Bolivia, o Chile, trabajó en Zubieta, con la Real Sociedad.
- Sí, esos años en Zubieta fueron increíbles. Entrenar en el club de mi corazón, en mi casa, donde yo jugué también... tengo un recuerdo magnífico de mi paso por la Real.
- ¿Qué generaciones pasaron por sus manos?
- Entrené a los del 95 (Sangalli, Guridi, Odriozola, Capilla, Bautista...), y eran unos chavales maravillosos. También estuve con la quinta de 1996 y con los del año 2000. A los de 1997 les tuve solo una pretemporada, porque después me marché a Arabia Saudí. Me acuerdo mucho de Guevara, era un chico muy maduro a esa edad ya.
- Zubieta es algo serio.
- Ha dado un vuelco tremendo en todos estos años. En esas instalaciones el trabajo es brutal. Es un sitio profesional y súper exigente, pero al mismo tiempo es un lugar en el que te hacen sentir bien. Los valores humanos y deportivos se transmiten desde la dirección hasta los entrenadores, que son quienes tratan con los jugadores. Eso es algo vital.
- Y la Real, ¿qué? ¿Le gusta lo que ve?
- Me encanta. Estamos viviendo un sueño. Hay muchas áreas en el club que rozan la excelencia. Hay que disfrutar de todo, no solo de la conquista de la Copa. Y hay que hacerlo ahora, no dentro de 20 años. Pelear por Europa con un equipo plagado de canteranos es algo extraordinario. No me olvido de Imanol y su cuerpo técnico, porque lo que están consiguiendo es algo histórico.
- Vamos, que acabamos quintos sí o sí.
- ¡Ja, ja, ja! Más allá de las bromas, yo así lo siento. Y si no lo conseguimos, seguiré igual de orgulloso. Es un momento glorioso en la historia del club. Es un gustazo ver a esta Real.
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