El Unión pierde después de pegar cuatro postes

Fue imposible prever el estilo de juego del Barakaldo de la mano del tercer entrenador de la temporada, Jabi Luaces, que relevó esta semana a Germán Beltrán. La primera ocasión llegó en el primer minuto del partido. Galán recibió con ventaja en el borde del área y disparó desviado. A los 13 minutos, Quique Rivero pudo adelantar de falta al Real Unión, pero su envío pegó en el larguero y se fue alto. En el ecuador del período, fue Capelete quien envió un nuevo balón al travesaño mediante un disparo desde el pico del área tras zafarse de varios defensas. Sin embargo, el primer gol llegó por parte de los locales.

En un córner, un mal despeje hizo caerle el balón a Estrada y éste adelantó al Barakaldo. La ventaja alivió a los locales, que disfrutaron de sus mejores minutos en el primer tiempo con combinaciones peligrosas en la banda izquierda entre Alain Ribeiro y Seguín.

Tras el paso por los vestuarios, también salió más enchufado el Barakaldo. Alain Ribeiro avisó en la primera acción de la reanudación con un disparo al larguero. Un minuto después, un envío en largo encontró a Urkiza dentro del área y, con un fallo de despeje de Fran Rivera y un marcaje blando de Iván Pérez, se plantó solo ante Irazusta y definió para aumentar la renta. El 2-0 fue un jarro de agua fría para el Real Unión, del que ya no se recuperó. El Barakaldo jugó a sus anchas y bajó el ritmo del partido para evitar cualquier sorpresa.

En el minuto 73, un pase largo de Pablo Santana encontró a Obolskii a la espalda de la defensa, y el ruso definió solo ante Irazusta, cerrando la cuenta. Curiosamente, fue tras el tercer gol del Barakaldo cuando el conjunto irundarra pareció despertar. En los minutos finales, llegaron oportunidades muy claras con las que pudo maquillar el resultado, pero no fue el día de sus delanteros. Galán estuvo a punto de marcar uno de los goles de la temporada con una sutil vaselina desde la frontal, pero el portero Rabanillo realizó una gran intervención y mandó a córner. Tras ese mismo saque de esquina, tuvo una triple ocasión clarísima el Real Unión: primero, un remate de Elosegi a la madera, luego el rechace de Llamas también a la madera y, finalmente, un remate de Lucbert desbaratado por la defensa sobre la línea de meta.