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ANXO TÁBOAS
Domingo, 22 de mayo 2022
Con notable superioridad, y con la solidez como enseña, el Beasain logró cerrar su segundo ascenso a Segunda RFEF –antes conocida como Segunda B– tras derrotar 3-0 al Txantrea. El equipo de Igor Gordobil fue claramente superior a un Txantrea que sufrió a balón ... parado y en los contragolpes. La diana por medio de un penalti de Ximon Aranguren mediado el primer periodo allanó el camino para el cuadro vagonero. La tranquilidad la trajo el revulsivo Orbegozo, al convertir una pena máxima en el minuto 82, y sentenciar al filo del 90. Dos décadas después, tras un segundo tramo de temporada excepcional, con 18 partidos sin perder, el Beasain dice adiós a Tercera.
En un saque de banda ejecutado con rapidez llegó la acción clave del partido. Pita superó en carrera a Anaitz. Con seguridad y nervios de acero, Ximon Aranguren golpeó por el centro para desnivelar –también en el marcador– un pulso que pintaba muy bien. La única acción de peligro del Txantrea llegó en una falta lejana escorada a la izquierda que Ekiza, en carrera, cabeceó al lateral de la red.
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Artetxe emergió en el reinicio con un vuelo que repelió una potente volea de Anaitz desde la frontal del área. Superó el susto el Beasain con un ejercicio de fútbol-control que sofocó la rebelión navarra.
Etxabeguren rozó el segundo a la salida de un córner. Más claro fue después de un cuatro para uno tras un robo de Cristian Sanz que Claver decidió finalizar con un manso disparo raso. Jaime Sánchez, entrenador del conjunto navarro, gastó sus naves con un triple cambio en el minuto 73 que no varió el rumbo del choque.
El segundo tanto llegó de penalti, tras una carrera del recién ingresado en el terreno de juego, Orbegozo, que terminó con el derribo de Ekiza. Éste fue expulsado por doble amonestación y con una ejecución cargada de confianza por parte del delantero exrealista puso el ascenso en la rampa de salida del cuadro vagonero. La eliminatoria estaba vista casi finiquitada, aunque el Txantrea se sacó un último arreón, ya desesperado. El Beasain tocaba el ascenso con las manos y Orbegozo, con una 'delicatessen' al filo del minuto 90, abrió las puertas de la Primera RFEF de par en par.
Por otro lado, el Olot, entrenado por el eibartarra Manix Mandiola logró el ascenso a la Segunda RFEF al imponerse al Tenerife B por un tanto a cero, gol logrado por Enric Vallés. Una nueva demostración de la sapiencia de Mandiola en los banquillos. La próxima temporada estará en el tercer escalón del fútbol estatal
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