'El Caney' renace y reclama el trono de 'The Way of Bonnie'

Fue un buen colofón para el último domingo de carreras, que como la semana pasada contó con una numerosa afluencia de público. Estas dos reuniones de septiembre han superado con creces las entradas del resto de la temporada, exceptuando a la de la Copa de Oro, que siempre es excepcional. El público pudo disfrutar de una notable edición de la decana, que rara vez decepciona.

'The Way of Bonnie' partió como favorito para emular el triplete de 'Revirado', pero también el campeón de Arizkorreta se dio de bruces con el muro de la historia. Sólo pudo ser cuarto, sin cambio de ritmo en la recta y lejos del nivel de sus mejores días. No al menos el suficiente para sujetar la corona ante una oposición que no permitía actuaciones grises.

'Shelby' hizo figura ganadora durante gran parte de la recta, con Alejandro Gutiérrez impasible en su montura intentando demorar el hachazo lo máximo posible. Durante muchos metros el tordo galopó sin rivales, rimbombante hacia el triunfo, pero a la altura de la vieja tribuna de General su jinete sintió una creciente amenaza tras él. 'El Caney' venía lanzado con una marcha más, y cuando buscó la fusta para pedir el extra a 'Shelby', el cuero se le escurrió entre los dedos.

Para entonces Jaime Gelabert traía a 'El Caney' con los ojos en sangre, recuperado el instinto ganador de sus mejores días. Incluso con el látigo hubiese sido difícil que 'Shelby' hubiese podido contenerlo. El ganador, otrora vencedor del Gladiateur, Corpa (aunque luego descalificado) y Gran Premio de Madrid, no era un cualquiera. Era el favorito de la Copa de Oro del año pasado. El viejo rey que, lamidas sus heridas, reclamó lo que era suyo. Con 'The Way of Bonnie' haciendo aguas, 'Mandalorian' llegó a última hora para ponerle la estocada final y sacarlo del podio. Honor para un gladiador que llega a su ocaso después de haberse ganado el corazón de toda la afición.