Lunes, 15 de julio 2024, 02:00
Deslumbrante en el Diputación del pasado año, Salmarak no había vuelto a brillar desde entonces. Sin embargo, todos la temían. La clase no se compra y ella desborda calidad en cada uno de sus movimientos. Sus nervios y los celos primaverales parecían condenarla a la mediocridad, pero ayer, en su casa, donde ella mejor se siente, renació para volver a maravillar y ganarse una plaza en el María Cristina.
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Ausentes las dos mejores yeguas sobre distancia, 'War of Dance' y 'Safaga', que salvo reenganche tampoco estarán en el María Cristina, se abría un nuevo abanico de posibilidades para ocupar el trono de las yeguas, al menos durante el verano donostiarra.
El premio Donostia Turismo podía ofrecer las primeras pistas, y tras la carrera, quedaron establecidas varias verdades. La favorita 'Clori' se había fajado con las mejores milleras durante la primavera, pero tenía sin aprobar el examen de la distancia. Cumplió con la segunda plaza, pero dio la sensación de llegar justita de fuerzas al disco final. Los 200 metros añadidos del María Cristina parecen un muro difícil de salvar. Aunque también es cierto que la carrera se corrió a un ritmo asfixiante. Intentó Jaime Gelabert dosificar a la brillante 'Hetera', pero se cansó más intentando frenarla durante el recorrido que empujando en la recta. La del Duque, tercera, progresará cuando aprenda a dosificarse.
Ajena a la batalla que se fraguó por la punta, 'Salmarak' marchó siempre última. Las órdenes de Miguel Alonso a su jinete fueron claras: «Suéltale las riendas y que respire a su paso. Si llega relajada a la recta, tiene cambio de ritmo para ganar». Alejando Gutiérrez aplicó las órdenes a la perfección. Su yegua dobló de manera magnífica y los cuerpos que perdió durante el recorrido los remontó doblando Bugatti a la perfección.
El resto fueron fuegos artificiales. Subir el repecho en mano, emparejarse, y al sentir una única vez el cuero del jinete cántabro, la torda se lanzó a ganar. Una aceleración arrebatadora, que le permitió realizar los últimos metros sin exprimirse. Un cambio de ritmo que parecía olvidado, pero que vuelve para opositar a la corona de mejor yegua donostiarra. De momento, se ha ganado disputar el María Cristina con tanta ilusión como la que más.
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Se entienden a las mil maravillas David Farlete y Nico de Julián, y ese feeling se traduce en buenos resultados en la pista. Ayer hicieron doblete en el desdoblado del hándicap con 'Walkczak' y 'Hebe', que batió a dos buenas yeguas como 'Grazalema' y 'Veremos' cediendo peso. La yegua del preparador catalán también tiene plaza asegurada en el María Cristina.
La reunión, que de nuevo se celebró con unas gradas muy animadas, comenzó con una prueba para caballos de raza árabe. Reducido pero selecto lote donde se jugaron la victoria los dos caballos con más calidad, 'Fateenah' y 'Asslan al Shahania', habituales en carreras de Grupo y que regalaron una emocionante llegada.
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