Otaño se queda fuera de la final

Los doce aizkolaris se enfrentaban a un trabajo de siete kanaerdikos divididos en tres grupos y lo cierto es que las plazas fueron claras y no hubo emoción por el quinto puesto. El campeón de Euskadi, Hodei Ezpeleta, paró el reloj en 15:42 y aventajó en más de un minuto a Otaño. Además, ambos compitieron en la misma tanda, en la primera, y la marca de Ezpeleta ya indicaba que se iba a clasificar. Bajar de 16 minutos en siete kanaerdikos en un muy buen registro y más viendo la ventaja que sacó a Otaño.

Los otros favoritos no fallaron. Al igual que el año pasado, Larrañaga destacó por encima del resto. Dio continuidad a la victoria del año pasado en la Urrezko Kopa y volvió a marcar el mejor tiempo en la eliminatoria, al parar el reloj en 14 minutos y 25 segundos. La verdad es que no hubo apenas diferencias entre los favoritos y los cuatro mejores entraron en un margen de 35 segundos.

Segundo se clasificó un renacido Aitzol Atutxa. El pentacampeón de Euskal Herria recuperó sus mejores sensaciones y paró el reloj en 14 minutos y 49 segundos, superando por siete segundos al favorito, Iker Vicente. El de Otsagabia cumplió con el trámite y terminó en 14:56, cuatro segundos antes que Julen Alberdi 'Txikia IV'. El de Azkoitia ha recuperado el golpe de antaño tras un 2021 difícil y en el que no encontró su mejor ritmo. Los cuatro primeros estuvieron en un pañuelo y fue precisamente Ezpeleta quien se clasificó en tierra de nadie y el que marcó la línea de estar dentro o fuera. Con los puestos de finalistas claros, por detrás hubo bonitas batallas. Entre Otaño y Ugaitz Mugertza solo hubo cuatro segundos y Joxean Etxeberria también pisó los talones al mutrikuarra.

Los finalistas del Campeonato de Euskal Herria están por detrás de los del Sherpa.ai, pero compiten al máximo nivel como ya se está viendo a lo largo de todo el año. Ezpeleta, Rodríguez, Basozabal, Etxeberria o Zaldua son aizkolaris de mucho nivel.

Zaldua fue precisamente noveno. Julen Larrea terminó en décima posición, por delante de Oier Kañamares, y cerró la clasificación Jon Rekondo, que ya no está al nivel de antaño, que le hacía entrar a grandes finales.

La final de la Urrezko Kopa se disputará el 15 de agostó, a las 19.30 horas, en la Trinidad, pero el trabajo que van a tener que realizar es el doble. Los cinco finalistas cortarán catorce kanaerdikos y la exigencia es mayor.

La madera que cortaron este sábado los aizkolaris era buena, pero los tiempos también fueron destacables, lo que enseña que el nivel es alto. Con un Atutxa ya mejorado, el duelo entre Vicente, Larrañaga y el propio Atutxa puede deparar emoción y espectáculo el 15 de agosto.