Interceptan misiles en el cielo de Diriyah en el inicio de la Fórmula E

Mientras el cielo de Diriyah, donde se disputó la segunda carrera de Fórmula E, se llenaba de fuegos artificiales para celebrar el final de la doble cita de este fin de semana que abría el calendario de la categoría eléctrica, unos misiles balísticos, presuntamente lanzados por parte de los hutíes, fueron interceptados justo al lado, en la capital de Arabia Saudí, Riyadh.

Varias agencias informaron de que la coalición liderada por Arabia Saudí, que lucha contra la milicia hutí, dijo el sábado que habían frustrado un ataque con misiles balísticos procedentes de los hutíes en la capital saudí, Riad, noticia que posteriormente dio a conocer la televisión estatal saudí. La coalición también dijo que había detectado el lanzamiento de varios drones cargados de explosivos desde territorio hutí.

Al incidente también se unió otra noticia hecha pública por la agencia SPA en la que se informaba de que un dron se dirigía hacia la ciudad de Jazan, pero fue interceptado y destruido. La coalición dijo que había destruido otro rumbo hacia la ciudad sureña de Khamis Mushait. Eso no impidió que las dos carreras se celebraran sin incidentes.

El viernes, en la primera cita, Nick De Vries (Mercedes) dominó de principio a fin. Fue el más rápido en todas las sesiones, las prácticas de jueves y viernes, la clasificación por grupos, la Super Pole y la carrera. Al día siguiente, Sam Bird (Jaguar) no esperó para mantener su racha histórica en la Fórmula E, con al menos un triunfo cada año.

Igual que hiciera en 2019, se anotó un triunfo en Diriyah batiendo en un bonito duelo al poleman Robin Frinjs (Virgin). Aunque la carrera no pudo cumplir los 45 minutos más una vuelta reglamentarios -un accidente de Lynn que acabó con el coche 'boca abajo' y obligó a sacar la bandera roja y poner un punto final adelantado a la pelea)- el británico y el holandés dieron un gran espectáculo en la pista. La suerte y la estrategia decantó la balanza a favor del nuevo piloto de Jaguar, que se estrena a lo grande. La Fórmula E viaja ahora a Europa, con su segunda cita en Roma donde DS, Nissan y Dragon estrenarán coche y, quizá, será otra historia.