Nadie regala duros a cuatro pesetas

Y eso que todo indicaba al principio que el punto caería del lado de Altuna III y Ladis Galarza. El amezketarra salió desbocado. Un gancho, una cortada, una pelota arrimada a la pared izquierda y un error de Artola pusieron el 4-0 en el luminoso. El alegiarra y Ander Imaz tuvieron que pedir descanso para frenar la sangría. Intentaron por todos los medios evitarle. Cargaron el juego sobre el zaguero de Baraibar, pero su esfuerzo no encontraba recompensa. El primero de los fallos de Ladis Galarza al mandar la pelota al colchón inferior les dio aire. Al tanto siguiente se produjo la jugada polémica del partido. Una escapada de Ladis con la derecha no pudo ser devuelta por Artola al cruzarse Altuna en su camino. El alegiarra pidió vuelta, pero el juez determinó que el tanto fuese a parar al casillero de los colorados. Hubo música de viento en las gradas.

Altuna III ni se inmutó. Siguió a lo suyo. Martirizando a sus rivales. Una apertura tras cortada, un nuevo error de Artola, un dos paredes culminado con una dejada al txoko y el primero de sus tres saques -falló Artola al restar de aire- puso el 8-1 a su favor. Muy pocos daban un duro por las opciones de Artola y Ander Imaz, nunca mejor dicho, pero los guipuzcoanos no entregaron la cuchara. Aquí nadie regala duros a cuatro pesetas. El que quiera ganarnos, tendrá que trabajar muy duro, darlo todo y sufrir, se dijeron el uno al otro. Ese es su lema desde que comenzó el campeonato. Y así fue. Poco a poco, tanto a tanto, la pareja de Baiko fue limando esa diferencia. Ladis Galarza no transmitía la imagen de seguridad de anteriores partidos y Artola comenzaba a buscarle las cosquillas a Altuna en los cuadros alegres. Ambos se conocen a la perfección desde aficionados, han sido rivales en numerosas ocasiones, pero el alegiarra tenía el orgullo herido. No iba a rendirse sin plantar batalla. Y vaya si dio guerra.

Con la colaboración de un enorme Ander Imaz, que solo perdió una pelota, el luminoso comenzó a apretarse (10-8, 11-9 y 15-13). Rentas de dos tantos solamente. Y llegó la vuelta merced a una tacada de cuatro a favor de los de Baiko (16-17). Era la primera vez que se ponían por delante. Artola, inspirado, le devolvía la moneda a su amigo. Altuna III y Ladis Galarza volvieron a tomar las riendas (18-17), pero nada estaba decidido. De nuevo cambió de dueño el partido, favorable a Artola y Ander Imaz (18-19). El alegiarra estaba crecido. Y el respetable le jaleaba.

Pero marró dos pelotas consecutivas, Altuna III sumó su último saque y cambió la decoración de nuevo (21-19). Artola puso más emoción con una volea (21-20), pero acto seguido su paradita al txoko se fue abajo. Altuna III y Ladis Galarza respiraron hondo. Menudo sufrimiento.