«Le doy mucho valor, he aprendido a saber estar cuando no va todo bien»

Altuna III sabe perder, lo ha demostrado en muchas finales. Hay veces en las que también hay que saber ganar. «Quiero darle las gracias a Peio por el comportamiento que ha tenido en el podio, y felicitarle por el grandísimo campeonato que ha realizado. Yo he aprendido a darle valor a perder, solo cada uno sabe lo que cuesta llegar hasta aquí. Es cierto que Peio juega mucho más de lo que ha hecho hoy y estoy seguro de que con la capacidad de trabajo que tiene le llegará su momento», añadió.

El amezketarra tenía preparado un plan de partido junto a su botillero y primo Gorka. «La verdad es que durante la semana no hemos hablado nada de cómo jugar, pero durante el calentamiento hemos comentado que tenía que jugarle a los pies y abrir mucho la cancha para que jugara con la derecha porque Peio tiene muchas virtudes pero ahí quizás sufre algo más». No solo vale con tener talento, trabajar fuera de la cancha también sirve.

El rictus de Peio evidenciaba que no estaba nada cómodo sobre la cancha. «A mí también me ha pasado. Él ha tenido buenísimas sensaciones durante el campeonato y no ha tenido ni un mal momento durante el Cuatro y Medio. Muchas veces al primer mal momento te entran las dudas, y en la final perdió pelotas que no suele perder, los primeros tantos han sido cortos y cuando te ves muy por detrás en el marcador te puede pesar», analiza la versión ayer del navarro.

Altuna III no tuvo ni que buscar las líneas. Ni realizar ganchos matemáticos. Ni hacer dos paredes con efecto solo al alcance de los mejores. «Iba a hacer mi partido, no quería volverme loco, y en una final mucho menos. Te ves 16-5 o así, pero igual te remontan, que peores cosas se han visto. Me he centrado en no regalar, en dar un pelotazo más y sobre todo en buscar los pies de Peio. Además, los tantos duros han caído de mi lado y eso desanima mucho».

Jokin Altuna no llegaba en las mejores condiciones a la final. Durante algunos entrenamientos sufría dolor en el hombro izquierdo. «Me entrené por última vez el viernes y la verdad es que ha sido cuando mejor me he sentido desde hace dos meses. Eso me dio confianza para la final. Hasta el tanto 19, donde otra vez me he dado un fortísimo golpe, no me he tenido ni que acordar de la lesión del hombro».

Sin apenas descanso porque el viernes comienza el Parejas, Altuna III ve «muy difícil poder estar en los primeros partidos. Estoy muy dolorido por el golpe, y cuando me levante de la cama estaré todavía peor. Tendré que decidir con los médicos y los fisios, pero está complicado porque me quiero recuperar bien».

Cuando impactó con la pared izquierda volvió a sentir «un chasquido, un pinchazo que te deja el brazo dormido». Con 20-9 en el marcador quiso entrar a vestuarios para tratarse. «He decidido entrar para que me den una crema y la zona se mantuviera caliente, casualidad que Peio ha fallado el siguiente tanto y por suerte el golpe no ha sido al principio de la final». Mañana estará en la presentación del Parejas, pero Aspe deberá ir buscando un sustituto para el amezketarra al menos en los primeros partidos.

Ayer alcanzó a Retegi II en la jaula. «Le doy valor porque he jugado ocho finales del Cuatro y Medio, pero contra cinco pelotaris distintos. Yo me mantengo, y lo valoro mucho».