Jokin Altuna-Oinatz Bengoetxea, al todo o nada

No se habían enfrentado nunca, y el de Baiko consiguió sacar a su rival del partido en la segunda parte. El de Aspe aguantó en la primera, aunque nunca dio la sensación de estar cómodo y con la inspiración de otras ocasiones. Aprovechó bien su saque para que el navarro no se le escapara, y llegó a mandar en el marcador por un par de tantos (6-8), pero le faltó regularidad y convencimiento.

Bengoetxea VI jugó su cartas. Aguantó cuando vinieron mal dadas y tejió su tela de araña conforme el vizcaíno no se podía recuperar del esfuerzo realizado. Movió bien la pelota y acertó en las decisiones, mientras que Elordi no fue capaz de rentabilizar sus esfuerzos y dejó bastante pelota servida.

De esta forma, el que vistió de colorado comenzó a abrir un hueco importante en el luminoso que ratificó su propuesta, y terminó por minar la moral de su oponente. El mallabitarra se fue del choque. No encontró la fórmula para volver porque tampoco sumó una tacada que hiciera dudar al navarro. Bengoetxea VI disfrutó bastante, y en una situación así su peligrosidad aumentó enteros y cerró el partido en cuanto pudo.