Pelota | Manomanista

Altuna III gana a un nuevo héroe llamado Elordi

El público despidió puesto en pie a los dos protagonistas, al ganador, Altuna III, y al héroe de la tarde, Elordi, aclamado y cuyo nombre corearon sus seguidores en compañía de algunos partidarios de otros colores. Acababan de ofrecer un partido vibrante, con alternativas, de estrategia, de tensión y pocos tantos largos. Solo cinco alcanzaron o superaron la decena de pelotazos. En el reciente Laso-Altuna fueron doce, más del doble a pesar de jugarse nueve menos. Estos dos encuentros, distintos, muestran cómo es el mano a mano moderno en toda la cancha. Y de paso dan la razón a quienes nunca han perdido la fe en la religión del Manomanista.

Elordi, capaz de sobreponerse a un 14-8 y a una racha de gran juego del rival, puso contra las cuerdas a Altuna III gracias a una reacción de idéntico calibre que le permitió irse al segundo descanso obligatorio tres tantos por delante, 15-18. Había complicado la vida al favorito –el dinero real ofrecido de salida fue de cien a veinte– y rozaba la victoria.

«Jokin ha salido como un toro del descanso», explicó el actual número uno del ranking de la Liga de Empresas de Pelota a Mano (LEP.M). «Se la ha jugado a vida o muerte y le ha salido todo. Así son los grandes campeones en este tipo de situaciones».

De vuelta a la cancha, restó Altuna III el saque de Elordi, encontró por fin la oportunidad de pasar a dominar perseguida sin éxito durante muchos minutos y cruzó la pelota a la pared izquierda imposible de llevarla a buena. Con el saque en su poder, el amezketarra vio iluminada una habitación oscura en la que el delantero campeón del Parejas manejaba el interruptor de la luz.

Altuna aceleró. «Me había dado cuenta de que Elordi se colocaba atrás y no le hacía tanto daño con la derecha, por lo que en ese tramo final, al encontrar por fin pelota que no he tenido al resto, he optado por buscar el remate. También he sacado mejor». Solo cruzaron 28 pelotazos a buena en los últimos siete tantos.

Una serie de buenos saques le dieron un tanto directo y tres oportunidades aprovechadas a la perfección gracias a dos dejadas al ancho y una de zurda con efecto marca de la casa, las tres en acciones de saque-remate. Elordi no pudo llevar a buena de zurda el último pelotazo, el de la tranquilidad para el ganador y el de la tristeza para un pelotari que en el fondo sale del Astelena más reforzado de lo que entró. Su cotización sube para el duelo contra Laso del viernes 12 en Bilbao o el sábado 13 en el Labrit del que saldrá el oponente de Darío en semifinales. Baiko y Aspe cierran hoy el calendario de la tercera jornada de la liguilla.

El soberbio sotamano con el que Jokin Altuna restó de derecha el saque de Elordi con 4-4 habría botado cerca de la raya del siete de no mediar el intento inútil de volea del vizcaíno. Fue el pelotazo de la tarde. No se había visto otro igual en los once partidos anteriores de esta edición, uno de esos que cohiben al contrario. No fue el caso. Además, el doble campeón manomanista de 2018 y 2021 cometió falta de saque en la siguiente acción.

«Sabía que el partido era difícil porque tenía enfrente a uno de los rivales más duros de hoy en día», reconoció el vencedor. «Quizá he pecado de prisa con la derecha y he perdido control por querer cruzarle para evitar su volea».

Sorprendió Elordi por estar muchos saques a bote. «Jokin gira tanto el cuerpo que te ve por el rabillo del ojo. Estoy contento por cómo he restado». Por cierto, pone lejos la pelota con la derecha. Ha progresado mucho en esa faceta.

Altuna jugará las semifinales de la competición reina por cuarto año consecutivo y quinto alterno, Además, ha estado entre los cuatro mejores en las siete últimas competiciones oficiales en las distintas modalidades. Regularidad a prueba de bomba.