Por delante desde el primer tanto al último

Esta vez, al contrario de entonces, Artola se hizo con la victoria por 22-16 después de ir por delante en el marcador desde el primer tanto al último. Sumó el primero de saque, como dos de los tres siguientes, y se plantó en un 5-0 que le dio la iniciativa en el electrónico para el resto de la tarde. No la cedió y la persecución resultó angustiosa y estéril para Peña II en un choque cargado de tensión porque el perdedor se iba automáticamente a casa.

Sacó bien Artola en ese inicio. Llevaba cinco tantos con el primer disparo para el 13-7. Yno hizo ascuas el de Alegia a tres regalos obra de Peña II. Fueron de esos que a la larga se pagan en el mano a mano en toda la cancha. Más aún cuando existe igualdad.

Con 2-0 en contra dispuso el tolosarra de una pelota en el ancho idónea para rebasar al contrario. Se le marchó a la red próxima al techo. Falta. Al mismo sitio se le fue otro derechazo con 5-3. Y el del 8-3, menos alto y más cruzado, tocó el fleje superior de la pared izquierda. Oportunidades para sumar tres tantos y, tan importante como ello, para recuperar el saque. Las tres, al limbo.

Fresco de derecha como durante el Campeonato de Parejas y con buen manejo del sotamano, Artola cobró ventajas reseñables. Los citados 5-0 y 8-3 precedieron al 11-5 y al 14-7. Ahora bien, el bazar estaba abierto en el Beotibar y el de Alegia picó con los regalos, que esta vez no fueron a parar a manos de su sobrino, que andaba por el frontón, sino al zurrón de Peña II. Un par de despistes de colocación, la dos paredes mal ejecutada y que no correspondía en ese momento del 11-7 y la dejada abajo del 14-8 con todo el frontón para él dieron aire al oponente.

El momento más comprometido para Artola llegó en el 14-10. No solo porque Peña II se acercó a cuatro tantos después de estar siete por detrás, sino porque en su intento de devolver un saque envenenado golpeó la pared con el codo izquierdo. Sintió dolor y pidió asistencia médica. Acudió diligente el doctor Íñigo Simón, quien, tras una primera exploración y previa solicitud de permiso a los jueces, llevó al pelotari al vestuario para atenderle.

Volvió rápido Artola a la cancha donde Peña II trataba de no quedarse frío. Y regresó con el brazo izquierdo en buenas condiciones porque resolvió el siguiente tanto con un potente gancho que rebasó la posición de Peña II. Esa jugada dio pie a un nuevo estirón en el marcador, al que subió un 20-10 difícil de remontar. Ya más tranquilo, el alegiarra cobró un puñado de remates, incluidos dos de dejada, una con cada mano.

Desperdició Artola la primera oportunidad de cerrar el encuentro. La parada al txoko con el 21-11 no llevó fuerza suficiente para llegar al frontis encima de la chapa. Reaccionó Peña y tomó riesgos. El contrario se vio en la necesidad de pedir su tercer y último descanso después de una preciosa dos paredes del tolosarra con el cuerpo cerca del muro y gracias a un elegante giro de muñeca.

Intentó otra dos paredes el tolosarra, esta con la zurda, pero cayó bajo chapa y Artola celebró un triunfo muy agradecido por sus numerosos seguidores, a los que vuelve a dar motivos para seguirle por los frontones.

Por ejemplo, el domingo en el Astelena de Eibar, donde jugará contra Joseba Ezkurdia, encuadrado también en el grupo A junto a Aitor Elordi, defensor de la txapela, y Javier Zabala. Con dos plazas para semifinales en juego por este lado del cuadro, el pronóstico para la liguilla de cuartos está abierto.