A otra cosa, mariposa

El 22-3 de Altuna III a Darío el año pasado en el Beotibar rondaba en la memoria de algunos. El 18-1 hacía temer un batacazo histórico. Aunque no hubo tal, Salaberria llevaba el susto encima de vuelta del vestuario: «He cometido falta de saque en el primer tanto y he ido todo el partido a remolque. Si juego como hoy, no tengo nada que hacer. Ezkurdia es un gran campeón y lo normal es que me gane. Pero yo no he demostrado lo que llevo dentro».

Salaberria fue víctima en primer lugar de Ezkurdia y también de un frontón complicado ideal para quien ataca y angustioso para el que defiende. La pelota viaja a una velocidad vertiginosa, hace extraños cuando toca la pared izquierda y los saques son misiles en manos de los especialistas, entre los que ocupa un lugar privilegiado el de Arbizu.

«He conseguido una tacada y con esa ventaja juegas más tranquilo», apuntó Joseba Ezkurdia, quien reconoció haber empezado nervioso el choque. La presión y la tensión propias del estreno.

Mantener la concentración y conservar el saque es fundamental en frontones tan favorables para el juego ofensivo. Lo tuvo claro Ezkurdia, ganador dentro de esta competición en Lekunberri tanto en 2016 (22-16 a Arretxe II) como en 2019 (22-8 a Bengoetxea VI). Le queda a Salaberria el consuelo de haber sumado un tanto más que todo un Oinatz.

Con el segundo tanto y el saque en sus manos, Salaberria vio la oportunidad de demostrar quién es. Dos tantos de saque y tres de saque-remate gracias a restos apurados de Ezkurdia ayudaron al de Goizueta a mostrar por lo menos parte de su valía y recuperar la confianza perdida. El rival impuso una velocidad que le desbordó y le empujó a emprender aventuras de colocación de las que salió trasquilado.

Ezkurdia tuvo en el saque, junto al poder de la derecha, su principal argumento. Diez tantos gracias al primer disparo son muchos. Empieza con un punto. «Ese era el objetivo», señaló. Sin embargo, «no hemos disputado tantos duros y no he visto cómo estoy físicamente». Eso lo podrá comprobar frente a Peio Etxeberria el viernes en el Deportivo de Bilbao.Lekunberri es historia. A otra cosa, mariposa.