El Parejas no se juega en Pamplona ni tampoco en Eibar

Esta decisión, adoptada por motivos de fuerza mayor, afecta directamente al desarrollo de la competición, que verá trastocadas sus fechas. El aplazamiento de esta jornada obliga a modificar el calendario, aunque en principio se respetarán las sedes. La final está anunciada para el próximo 5 de abril en el Bizkaia de Bilbao -coincide con las elecciones autonómicas-, pero pasaría a disputarse una semana más tarde, el domingo 12. Eso siempre que la medida solo se circunscriba a dicha jornada.

En el supuesto de que tuviese que ser ampliada alguna otra más, que también se contempla debido al cariz que están tomando los acontecimientos, el retraso acumulado para completar la fase final del campeonato sería bastante importante. Tendría consecuencias para el inicio y la conclusión del Manomanista, la competición reina de la mano profesional, y también para las vacaciones de los pelotaris de junio.

Las cabezas visibles de Baiko y Aspe se reunieron el miércoles en Bilbao para trasladar posteriormente su decisión a Euskal Telebista, con quien tienen firmado un contrato que les obliga a programar tres festivales cada fin de semana: viernes, sábado y domingo. Evidentemente, ambas partes necesitaban llegar a un acuerdo. Las empresas no eran partidarias de que la jornada se disputase a puerta cerrada siguiendo las recomendaciones de las instituciones, como ha sucedido en otros deportes hace varios días, porque eso supondría un quebranto económico muy importante.

La venta de entradas es una de sus principales fuente de ingresos. El Labrit, cuyo millar de localidades se quedan escasas ante semejante demanda semanal, ya había colgado con antelación el cartel de no hay billetes -supondrá cuando se celebre el decimocuarto lleno consecutivo-. Y en el Astelena de Eibar los pelotazales ya habían reservado más de 800 entradas. El ente vasco, que ha visto menguada notablemente su oferta televisiva del fin de semana por la suspensión de todas las actividades deportivas -la pelota ocupaba un espacio preferencial-, ha aceptado finalmente la propuesta realizada por la Liga de Empresas, por lo que no habrá retransmisiones en directo al no programarse partidos de profesionales.

La situación sanitaria no invita precisamente al optimismo tras el incremento diario del número de fallecidos y de las personas contagiadas. Las empresas son conscientes de ello. Al igual que la mayoría de la población, desconocen a lo que se enfrentan y las consecuencias que podría acarrear la expansión indiscriminada de la pandemia. Incluso el propio Campeonato de Parejas estaría en riesgo. De momento mantienen la calma a la espera de acontecimientos. No solo ellos, también los pelotazales que se preparan para afrontar un fin de semana atípico sin partidos y con los frontones cerrados.