El verano y San Mateo reconfortan a Rezusta

Este verano en general y el Torneo San Mateo en particular reconfortan a Beñat Rezusta. Después de alcanzar cuatro finales consecutivas en el Campeonato de Parejas entre 2016 y 2019, su figura había decaído al mismo tiempo que reinaba Zabaleta. Sus magníficos resultados en la competición que dominó con brazo izquierdo de hierro no han sido los mismos a partir de 2020.

Cumplidos 30 años en febrero, sin perder su estatus dentro de Aspe pero con la amenaza cercana de nuevos zagueros, trabajaba con ahinco en busca de un espaldarazo. Lo ha conseguido durante esta campaña estival.

No solo ha ganado el Torneo San Fermín con Altuna III y el San Mateo con Ezkurdia. Las victorias no lo dicen todo. Verle jugar de tú a tú contra Zabaleta, soltar la zurda con electricidad, pegar un rebote soberbio como el del 4-2 y gozar pelotazos uno tras otro dan un plus a cualidades que nunca ha perdido como la solidez, un físico admirable y la capacidad para cubrir cancha.

Rezusta elogia a Ezkurdia, su compañero: «El zaguero que juega con Ezkurdia lo hace bien a menudo». Agradan esos reconocimientos. La labor del navarro , ganador de los dos torneos en los que ha actuado de suplente –Bilbao y Logroño–, ha sido fundamental tanto en los dos partidos del grupo como en la final. Septiembre ha mostrado al mejor Ezkurdia de los últimos meses, fundamental para atar en corto a Zabala y a Zabaleta, más fallón y menos dominante que el viernes.