Los trabajadores de Candy aceptan los dos nuevos proyectos de reindustrialización

Los trabajadores de Candy Hoover de Bergara han dado este lunes el visto bueno a los dos proyectos para reflotar la empresa que la Diputación les presentó hace dos semanas, por lo que el siguiente paso será reunirse con los responsables de ambas, la francesa Urbanext y la local Lanteko.

El gabinete del todavía diputado general Martín Garitano ha difundido un comunicado en el que informa de que los empleados de Candy han aceptado en asamblea estas dos propuestas de reindustrialización que, según asegura, podrían dar trabajo a las 70 personas empleadas en Candy.

Explica que los trabajadores se reunirán con los responsables de los proyectos "para concretar su realización y acordar los pasos a dar en adelante", lo que harán con la ayuda de la Universidad de Mondragón, con la que el gobierno de Bildu firmó un acuerdo "para el desarrollo de posibles planes de reindustrialización".

Señala que tanto Urbanext como la empresa de Bergara Lanteko trabajan en el ámbito del reciclaje y sus proyectos se han presentado también a los sindicatos y al Gobierno vasco.

El comité de empresa informó el pasado 5 de junio de que la empresa francesa se dedica a la fabricación de mobiliario urbano con material de "tetrapack" reciclado.

En Bergara ha presentado distintas muestras de lo que se puede elaborar con este material, desde bancos y hasta terrazas a maceteros y vallados.

Esta empresa podría absorber alrededor de 40 trabajadores en el plazo de un año y utilizaría las actuales instalaciones de Candy Hoover, mientras que para poner en marcha el segundo de los planes, promovido por emprendedores locales, se requeriría una infraestructura más amplia que la existente, precisó el comité.

Es un proyecto ya avanzado para la "refabricación" de piezas para automóvil, que requeriría de un proceso de año o año y medio y podría absorber unos 20 o 25 trabajadores, añadió.

El gobierno de Garitano considera que "ha cumplido su compromiso y ha presentado dos proyectos viables a los trabajadores de la empresa de Bergara" y afirma que "el modelo de Candy es exportable a otros ámbitos y que puede ayudar a que salgan adelante empresas que se encuentran en dificultades".