Las críticas de Imaz al impuesto a las energéticas reciben rechazos y elogios

Las declaraciones del CEO de Repsol, Josu Jon Imaz, al asegurar que el impuesto a las empresas energéticas «no va contra los ricos, sino contra la actividad empresarial», han generado división de opiniones. El delegado del Gobierno en el País Vasco, Denis Itxaso, aseguró que «hay que tener poca inteligencia emocional para no estar del lado de los vulnerables» en la crisis actual.

El coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, apostó por que se intervengan los sectores energético e inmobiliario, y que el impuesto a las eléctricas sea «una medida estructural». Desde Unidas Podemos, Roberto Uriarte cree «Ayusista o Trumpista» el argumento de Imaz. Pero la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) criticó el tributo y dejó claro en un análisis que sectores como el eléctrico, el bancario y el energético no son los que más están ganando con el alza de la inflación. Explicó que sus beneficios deben ponerse en relación con el capital invertido, y ahí baja la rentabilidad.