Propiedades del boniato, el desconocido tubérculo dulce

¿Cuándo es la temporada del boniato? La temporada ideal para degustar este alimento en distintas recetas es el invierno, incluso se puede cultivar, puesto que no requiere de unos cuidados muy especiales.

¿A qué sabe el boniato? El boniato tiene un sabor dulce, afrutado, cremoso y terroso. Su dulzura se debe a su alto contenido en azúcares, especialmente sacarosa y glucosa. La dulzura del boniato varía según el tipo. Los boniatos anaranjados suelen ser más dulces que los blancos. La dulzura también puede variar según su grado de maduración. Los boniatos más maduros suelen ser más dulces.

Hay que elegir los bonitos que tengan un aspecto más firme, ya que es un producto muy frágil. Una vez en nuestras cocinas, se debe almacenar en un lugar fresco, seco y oscuro, donde puede conservarse hasta diez días. Es aconsejable cocinarlo y mantenerlo en la nevera durante máximo una semana, pero nunca guardarlo crudo en el frigorífico.

El boniato se consume siempre cocinado, ya que crudo resulta indigesto. En la cocina, ofrece infinidad de posibilidades, aunque lo más común es usarlo como sustituto de la patata, sobre todo en preparaciones fritas. Puede ser un ingrediente muy interesante en purés, sopas o guarnición de platos de carne de cerdo, pescados o aves. Una sabrosa forma de prepararlo es asado al horno, aunque también se puede degustar troceado y frito. De esa manera, se asemeja a las patatas fritas, y sirve de guarnición a muchos segundos platos. Su sabor dulce y afrutado que es perfecto para postres o platos salados.