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Jueves, 26 de septiembre 2019
250 ml de leche entera
250 ml de nata
5 yemas de huevo
85 g de azúcar
1 cucharada sopera de whisky (10 ml)
15 g de café soluble
100 ml de nata
1 cucharada sopera de azúcar glas
Ralladura de 1 naranja
1 cucharada sopera de miel
500 ml de agua mineral
100 g de azúcar
70 ml de whisky
1 hoja de gelatina
Precalentamos el horno a 80°C.
Mezclar la leche con la nata en un cazo y llevarlo a ebullición.
Retirar del fuego, añadirle el café soluble y dejar infusionar durante 10 minutos.
Mezclar las yemas con el azúcar en un recipiente, pero sin batir.
Pasado este tiempo: agregar la mezcla de leche y nata sobre las yemas y el azúcar (debe estar fría para que las yemas no cuajen).
Mezclar bien y filtrar por un colador fino.
Añadir la cucharada sopera de whisky, rellenar los vasitos con la preparación y hornear durante 1 hora y media.
Retirar del horno y dejar templar.
Enfriar en la nevera como mínimo 1 hora.
Cuando esté frío, servirlo acompañado del chantilly de miel y naranja y de 1 cucharada sopera de granizado de whisky.
Semimontamos la nata con el azúcar glas.
Añadir la ralladura de 1 naranja y la cucharada de miel.
Y mezclar con mucho cuidado.
Hidratamos la gelatina con agua fría.
Mezclar el agua junto con el azúcar en un cazo y llevarlo a ebullición.
Retirar del fuego, dejar templar y agregar la gelatina escurrida.
Mezclar bien y dejar enfriar.
Cuando la preparación esté fría, añadir el whisky y volver a mezclar.
Colocar en un recipiente y congelar.
Una vez congelado el granizado, raspar con la ayuda de un tenedor para sacar las escamas.
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