Trucos para pelar las uvas y quitarles las pepitas

¿Conoces algún truco para pelar las uvas y dejarlas sin pepitas? Pelar las doce uvas a toda prisa, en los momentos previos a decir adiós al año, se ha convertido en todo un ritual para muchos. Aunque la verdad es que son pocos los que le tienen cogido el truco y no se dejan media uva por el camino.

La mejor opción sin duda es dejar las uvas ya listas para no tener que andar con prisas en el último momento. Otra alternativa es adquirir en el supermercado las uvas ya peladas y sin pepitas, aunque hay que decir que no es lo mismo, y quién sabe si darán la misma suerte.

En todo caso, lo mejor es sorprender a nuestros invitados con unas uvas perfectamente listas, para que llegado el momento y con la pierna derecha siempre adelantada, para entrar en el próximo año con buen pie, lo único de lo que haya que preocuparse es de brindar sin riesgo de atragantamientos.

En todo caso, lo mejor es sorprender a nuestros invitados con unas uvas perfectamente listas, para que llegado el momento y con la pierna derecha siempre adelantada, para entrar en el próximo año con buen pie, lo único de lo que haya que preocuparse es de brindar sin riesgo de atragantamientos.

Antes de pelar las uvas, ¿por qué no quitar las pepitas? Este paso suele ser algo complicado ya que tendemos a realizarlo con los dedos, destrozando las uvas. Para evitar esto y hacerlo de forma más rápida y limpia un buen truco es ayudarse de un clip. Puede parecer disparatado, pero realmente funciona.

El truco consiste en doblar hacia arriba el extremo de fuera del clip, de esta forma conseguiremos un gancho y, utilizando el propio agujero de las uvas, introducir el extremo curvo. Basta con girar el clip dos veces sobre su propio eje y sacarlo, verás cómo las pepitas salen enganchadas.

Es recomendable retirar las pepitas antes de quitar la piel, ya que al ser algo dura mantiene la consistencia de la uva, evitando que se nos desmonte al retirar la piel.

Una vez tengamos las uvas libres de pepitas es muy sencillo retirar la piel. Basta con poner un cazo con agua a hervir y una vez se haya alcanzado el punto de ebullición introducir las uvas durante 30 – 45 segundos.

Para no quemarse las manos al retirar la piel es recomendable tener preparado un bol con hielos para enfriar las uvas nada más sacarlas.