El cierre del restaurante Eme Be Garrote de Martin Berasategui deja a San Sebastián sin otra estrella Michelin

El Eme Be Garrote, que nació bajo el sello de Martín Berasategui, fue presentado como «la sidrería del siglo XXI» cuando se abrió, hace una década, porque ocupaba el caserío de la antigua sidrería Urkiola. Este restaurante ubicado en el barrio de Ibaeta de San Sebastián logró en poco tiempo una estrella Michelin y una identidad propia en la gastronomía guipuzcoana. Ahora acaba de echar la persiana, y su cierre se suma a otras despedidas significativas de la cocina local, como el del Zuberoa a final de año.

El propio Martin Berasategui explica el cierre. «El Eme Be Garrote fue un proyecto que nació para mantenerse en un tiempo limitado. Mi idea era tenerlo cinco años, pero al final han sido diez. Los propietarios del caserío contactaron con mi amigo Luismi Garayar, reconocido profesional de la carne con su empresa Cárnicas Luismi, y éste a su vez me involucró en el empeño de montar ahí un proyecto distinto. Coincidió que en ese momento yo acariciaba la idea de hacer un regalo a Donostia, mi ciudad, que me lo ha dado todo. Quería un restaurante donde pudiera verse mi forma de entender la cocina a precios más ajustados de los de mi 'tres estrellas' en Lasarte. Y me gustaba la idea de 'reinterpretar' una sidrería, ese mundo que tanto me gusta, de otra manera. Lo cuidamos todo al máximo, con una decoración moderna con kupelas, y el público respondió».

El propio nombre del local era reflejo de la personalidad del chef, con un nombre basados en sus iniciales, 'eme' y 'be', y el añadido del 'garrote' que popularizó el cocinero. Luego llegó la estrella Michelin, en 2018, otra más del universo Berasategui, el cocinero de la gastronomía española con más estrellas, un total de doce, y en el 'top mundial' por su colección de distinciones de la guía de tapas rojas. Pero ahora se cumple el tiempo de la concesión y Berasategui y sus socios prefieren apostar por otros proyectos.

«Me siguen llegando propuestas muy importantes y tengo que dedicarles mi tiempo, aunque mi prioridad sigue siendo la 'casa madre' de Lasarte», explica el cocinero donostiarra. «A lo largo de 2023 espero abrir nuevos proyectos en Dubai, Tenerife y Marbella, entre otros, y mantenemos los que ya están en marcha en España y en el mundo».

Berasategui concibió el Eme Be «como el restaurante al que iría a comer con mis amigos», con productos reconocibles de la cocina vasca y un ambiente distendido. Diferentes jefes de cocina formados en la factoría de Lasarte fueron pasando por sus fogones, con Rafael Moya al frente de la sala durante buena parte de esta década. El espacio ha sido también sede de distintas celebraciones de clubes deportivos o entidades culturales.

Ahora se consuma su cierre y no se descarta que en este caserío de Ibaeta prospere pronto un nuevo proyecto hostelero. La sidrería Urkiola, ahí radicada hasta la apertura del Eme Be, tenía más de cien años de historia, con una producción de 100.000 litros anuales de sidra.

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