

Secciones
Servicios
Destacamos
Jueves, 10 de junio 2021
Recuperar una olla quemada es una misión complicada, pero nunca imposible, si sabemos como limpiarla. Por ello, evita que una olla quemada se convierta en un drama y aprende a arreglar este pequeño desliz con estos sencillos trucos de limpieza, que solos o combinados, seguro te ayudarán a devolver la olla a un buen estado.
Si se te ha ido el santo al cielo y te has encontrado la olla quemada lo primero que debes hacer es limpiarla con jabón, agua y una almohadilla o estropajo suave que retire la suciedad sin rascar la olla.
Una vez limpia, una buena opción es darle una vuelta al clásico enjuagado con detergente. Añade agua caliente y detergente en la olla y ponla a fuego lento hasta que alcance el hervor. Es recomendable poner una tapa para que la espuma no salga. Lo mejor es utilizar una tapa de cristal, ya que las de metal suelen tener unos pequeños agujeros, por los que la espuma podría salirse también. Cuando empiece a hervir retírala y espera a que se enfríe para frotar.
Si esto no funciona, un buen truco es cubrir la parte quemada con agua caliente y añadir dos cucharadas de sal o de bicarbonato de sodio. Se deja reposar unos 15 minutos y se frota con un estropajo suave o un cepillo. Si las incrustaciones persisten, vacía la olla y vuelve a rellenarla con agua y sal o bicarbonato, y ponla al fuego hasta que empiece a hervir. Y una vez haya comenzado el hervor retira la olla, deja que se enfríe y vuelve a limpiar la olla.
Y si no tenemos sal o bicarbonato a mano, podemos recurrir a un clásico en cuanto a la limpieza de menaje de cocina se refiere: el vinagre. El vinagre blanco (en la lista de alimentos que no caducan) es un estupendo desincrustante que actúa sin necesidad de frotar. Aplícala sobre la superficie quemada y déjala hervir durante cinco minutos. Después límpiala a fondo con detergente y agua para eliminar todo posible aroma a vinagre.
Realmente todos los trucos que suelen ser utilizados también para limpiar sartenes, ollas o fuentes que no estén quemadas pero tengan aceite o restos de comida, de los que no conseguimos deshacernos fácilmente, nos pueden ser de gran ayuda. Por lo que si todo esto no te ha funcionado, prueba a aplicar agua caliente con zumo de limón, ya que el ácido de esta fruta quemará los restos.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El mastodonte de Las Contiendas y las diferencias con un mamut
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Favoritos de los suscriptores
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.