11 trucos para cortar la cebolla sin llorar

11 trucos para cortar la cebolla sin llorar

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   Enfriar la cebolla: el frío es el mejor aliado para evitar las lágrimas, ya que va a permitir inhibir la liberación del gas que las provoca. Es uno de los métodos más eficaces y sencillos, ya que basta con meter la cebolla 15 minutos antes de manipularla en el congelador -con cuidado de que no llegue a congelarse- o directamente conservarla en la nevera.

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   Pasarla por agua: mojar la cebolla bajo un chorro frío o caliente, a riesgo de que cambie algo su textura, ayudará a diluir y disipar el gas liberado durante el corte.

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   Colocar un paño húmedo en la tabla de cortar: este remedio se ha viralizado por su sencillez y efectividad y consiste en colocar en el extremo más próximo a la persona que corta de la tabla un paño o servilleta humedecida en agua.

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   Utilizar protección: ya sean gafas -habitualmente se utilizan las de buceo- o mascarilla, el objetivo es evitar el contacto entre ese gas irritativo con los ojos y la nariz. Es un truco algo molesto, pero cómico y 100 % efectivo.

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   Cortarla junto a una corriente de aire: si manipulamos la cebolla al lado, por ejemplo, de un ventilador o de una ventana abierta, se va a favorecer la dispersión de las sustancias que nos hacen llorar.

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   Junto a una vela encendida: tan curioso como efectivo, tener una vela o fuente de luz activa junto a la tabla de corte va a ayudar a la absorción de esos gases, impidiendo su contacto con nariz y ojos.

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   Evitar manipular la raíz: cortar la cebolla evitando cortar la raíz y el área próxima a la misma -siendo esta el foco de concentración de los compuestos responsables- es uno de los trucos que practican los profesionales de la cocina.

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   Emplear un cuchillo bien afilado: además de facilitar la tarea de picar o trocear cualquier alimento, emplear un cuchillo con el filo en condiciones favorecerá un menor 'daño' a las capas de la cebolla, liberando menor cantidad de la sustancia irritativa.

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   Untar el cuchillo en vinagre: poner un poco de vinagre en el filo del cuchillo, a riesgo de que pueda alterarse ligeramente el sabor de la cebolla, es muy efectivo a la hora de neutralizar la sustancia liberada.

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    Ayúdate de la campana extractora: cortar la cebolla bajo una campana extractora encendida nos va a ayudar a evitar las lágrimas, puesto que el gas será rápidamente absorbido y eliminado.

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    Opta por la picadora: es posible que parezca un rollo aplicar los trucos hasta ahora descritos. Así que si buscas cortar cebolla sin llorar y sin complicaciones, hazte con una picadora.