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MIRARI GÓMEZ
Martes, 6 de octubre 2020, 08:12
Situado en un caserío Arrasatearra del siglo xv y rodeado de las verdes montañas que abrazan el núcleo industrial se encuentra Arteaga, un negocio hostelero que, con casi veinte años de vida, conjuga a la perfección las dos pasiones de sus gerentes: la tradicional gastronomía vasca y el vino.
A las riendas de Arteaga se encuentran el cocinero Igor Ezpeleta y la sumiller Maider Larrañaga, una pareja que, tras finalizar sus estudios de hostelería y adquirir experiencia, tuvo clara la idea de querer apostar por un negocio propio. «Deseábamos tener algo nuestro donde poder trabajar desde cero. Por eso, cuando en 1998 se nos planteó la oportunidad de comprar el caserío, no dudamos en lanzarnos», recuerdan.
Tras tres años de «desesperantes» obras de restauración, el sueño estaba cumplido. Arteaga abrió sus puertas y lo hizo con una doble visión –como restaurante y como casa rural-, pero con el único y claro propósito de «poner en valor lo de aquí, nuestro entorno y nuestra cocina y producto».
Así, en 2001 nació este restaurante con una propuesta gastronómica basada en las recetas tradicionales de la cocina vasca y en la materia prima local, tratando de sacar de su huerta «el máximo producto posible». Manteniendo esa misma filosofía y realizando sustanciales mejoras como la adquisición de una parrilla, Arteaga ha ido, poco a poco, evolucionando a lo que es en la actualidad: un lugar versátil que no deja indiferente a nadie. Los comensales pueden escoger entre disfrutar de un menú especial compuesto por dos platos, postre casero, café y vino (22€); u optar por una completa carta de la que cabe destacar sus carnes y pescados a la brasa.
Sin embargo, ambos destacan que «el mayor giro» que dio Arteaga llegó tras la decisión de Maider Larrañaga de introducirse en el mundo vinícola y la consecuente puesta en marcha de una envidiable 'vinoteka'. «La bodega antes era un complemento al restaurante y ahora es una pieza fundamental del negocio», admite la sumiller, quien reconoce que «nunca me había interesado ni gustado el vino, pero quise poner una pequeña zona de bodega y para eso tenía que saber del tema». La bodega es un claro reflejo de la sumiller y de su trayectoria. La propia Maider la define como un espacio «muy móvil, que va creciendo junto a mí y a lo que me interesa». Pero, ¿qué cantidad de botellas posee actualmente? Ni ella misma lo sabe, pero se puede intuir que pocas no son pues confiesa que «aproveché el confinamiento para clasificarlas, pero no me dio tiempo a terminar».
Además de ser una parada obligatoria para los amantes del buen comer y del vino, Arteaga también ofrece servicio de alojamiento, aunque debido a la actual crisis sanitaria no se encuentra en funcionamiento. Mientras que los 400 m2 de la planta baja del caserío están destinados al restaurante, dividido en el comedor principal, la vinoteca y un reservado; la parte superior ejerce de casa rural, con cinco habitaciones dispuestas a acoger a todo aquel visitante que quiera vivir una experiencia completa en este fantástico entorno natural. Las prestaciones del inmueble animaron a la pareja a apostar por esta diversificación del negocio: «Era una muy buena oportunidad porque, al encontrarnos en una zona muy industrial y cuna de cooperativas, hemos trabajado mucho con los profesionales y el turismo empresarial. Fueron muy buenos años». Actualmente, la casa rural se encuentra «en un impás» y la pareja confiesa que está «muy centrada» en sacar adelante un restaurante con el que ambos han conseguido «disfrutar del trabajo. Aunque trabajamos muy duro, nos gusta mucho lo que hacemos y nuestro objetivo es reflejarlo en cada uno de los servicios, pretendiendo hacer pasar un rato agradable a todo aquel que nos visita».
Tras un máster y varios cursos, Larrañaga se ha convertido en una gran figura de la sumillería y de lo que pretendía ser una «pequeña zona de bodega» se ha erigido una impresionante vinoteca preparada para ofrecer un perfecto maridaje a la propuesta gastronómica de Arteaga.
Garagartza Auzoa, 37
20500 Arrasate-Mondragón
Tel.: 943 711 881
Web: arteagalandetxea.com
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