La mala experiencia de Nerea Garmendia con la reforma de su vivienda en San Sebastián

Nerea Garmendia está «desesperada». La simpática presentadora de Beasain continúa con una apretada agenda profesional que este mismo fin de semana le ha llevado a actuar en Donostia. En esta ocasión, la actriz de 44 años de edad fue protagonista en el Keler Espazioa, recinto que abarrotó y que le dedicó una sonora ovación después de hacer gala de su extrovertida personalidad y su gran sentido del humor. De esta forma, la expresentadora de espacios como 'KTM', 'La Alfombra Roja Palace' o 'Akelarre' se olvidó por unas horas de un pequeño gran contratiempo que le está llevando por la calle de la amargura en los últimos días en el ámbito doméstico.

¿El problema de Nerea Garmendia? La pequeña reforma que abordó recientemente en su domicilio en San Sebastián. Allí la presentadora tenía intención de renovar los suelos y aprovechar de paso para pintar las paredes. Para ello, optó por contratar a una empresa de reformas integrales… que al parecer le ha dejado con todo empantanado. «Hola familia, aquí estoy en mi querida Donostia, dando una vueltecita. Y aunque parece que todo es idílico necesito haceros una petición urgente. Me pongo seria, necesito contaros lo que me ha pasado. ¿Os acordáis que os dije que estaba haciendo obras en mi casa? Los obreros, la empresa que me he contratado, me ha dejado tirada», aseguraba con cara de circunstancias en un storie de Instagram, red social en la que acumula más de 123.000 seguidores.

La actriz guipuzcoana, siempre tan extrovertida como sonriente, no ocultó su preocupación por el resultado de la reforma, y por ello optó por solicitar ayuda a sus fans en internet. «Necesito urgentemente, para empezar mañana si puede ser (por hoy lunes), una empresa que se dedique a hacer reformas integrales. Lo poco que me han hecho me lo han hecho mal. Hay que arreglar cosas que han hecho mal. Tuve incluso que llamar a la Policía», añadió, cariacontecida.

Sea como fuere, la experiencia de reformar la casa ha sido una pesadilla para la propia Nerea Garmendia, que no ha ahorrado en adjetivos para calificar su vivencia personal… y eso que aún no ha terminado. «Fue una cosa terrible, horrorosa. Y os hago esta petición porque realmente lo necesito. No es una broma. Si podéis escribirme por privado…Básicamente es suelo y pintura, lo que necesito desesperadamente. Ah, bueno, en Donostia. Estoy desesperada», concluía.