Una manifestación recorre San Sebastián contra la incineradora

Más de un millar de personas se han manifestado esta tarde en Donostia contra la incineración. La marcha ha comenzado a las cinco de la tarde junto al estadio de Anoeta y ha estado encabezada por unos jinetes montados en caballos procedentes de Astigarraga, Lesaka, Zubieta y otros municipios.

Bajo el lema Alternatiba dagoelako, errausketarik ez! - No a la incineración, porque hay alternativa, los participantes han recorrido, a pesar de la lluvia y del frío, las calles de San Sebastián. La manifestación ha contado con el respaldo de un centenar de colectivos ecologistas, como Greenpeace y Eguzki, y asociaciones de diferentes ámbitos sociales, entre las que se encontraban formaciones políticas como EH Bildu, Podemos y Ezker Anitza-IU, así como los sindicatos ELA, LAB, CC OO, ESK, Steilas, Hiru, CGT y CNT.

María Luisa Sánchez, portavoz de la coordinadora de plataformas anti-incineración, comentó antes del inicio de la manifestación que «llevamos trece años reivindicando que no queremos una incineradora, ni en Zubieta ni en ningún sitio de Gipuzkoa, por todos los perjuicios que conlleva, empezando por el tema de la salud, siguiendo por el medio ambiente y acabando porque nos va a hipotecar por 35 años con una obra faraónica que se va a hacer con un coste de alrededor de mil millones. Los guipuzcoanos vamos a estar hipotecados hasta el año 2051. Hoy reivindicamos que no queremos ninguna incineradora».

También señaló que «la alternativa que presentamos no es nueva, la tenemos preparada desde hace muchos años. Consiste en apostar por el reciclaje. Hay pueblos en Gipuzkoa que están alcanzando 50% de reciclaje. En Donostia e Irun se está llegando a entre 250 y 300 kilos por habitante al año. Tenemos las alternativas suficientes con plantas de compostaje, de reciclaje, con tratamiento biológico para que llegar a 50 kilos por persona. A partir de ahí no sería necesario incinerar el resto. Hay alternativas como llevarlo a un vertedero que no causaría ningún trastorno a los vecinos».

Según ha explicado, esos vertederos serían para inertes , «lo poco que queda de la bolsa de basura que no tendría olor ni lixiados ni nada de nada».