«Esto va a ser un caos por los atascos y la nieve»

Patxi Iturrioz es conductor del autobús escolar que traslada a los estudiantes berastegiarras desde los centros de Tolosa. La noticia del corte de la autovía la enmarca en «la falta de controles. Ni Ertzaintza ni policías municipales impiden el paso de vehículo en los cruces y accesos a la carretera, lo que provoca numerosos problemas en cuanto se cruzan camiones o autobuses, lo que provoca que se colapsa enseguida la carretera ya sea por nieve o un accidente en la autovía». Iturrioz asegura que «además, en la carretera a Berastegi cuaja enseguida cuando empieza a nevar con ganas, y los problemas se multiplican. Ya de normal solemos andar con muchos problemas, por lo que no quiero ni pensar lo que puede pasar cuando todo el tráfico de la A-15 se desvíe por esta carretera que no está preparada para soportar mayor volumen de vehículos del que ya transita por ella. Nosotros realizamos dos servicios escolares y entre 10 y 12 de línea. Va a ser complicado circular con los autobuses y cumplir los horarios de los servicios».

María Luisa Otegi coincide con Patxi Iturrioz en que la carretera entre Tolosa y Berastegi «no está acondicionada para el gran número de coches que transitan por la autovía. Lo primero, no existe una vía alternativa, una salida o entrada en caso de que se produzca cualquier incidente». A lo que se suma la dificultad del paso de las máquinas quitanieves, «ya que la anchura de la vía impide su paso con una circulación fluida». María Luisa reconoce que «hace unos días comentamos este tema un grupo de vecinos, ya que nos preocupa la inexistencia de una salida de la carretera hasta Tolosa». A lo que la berastegiarra suma la preocupación de «¿qué va a pasar si cuando nieve y haya largas colas, se produzca una emergencia en Berastegi? ¿Cómo van a atender a cualquier incidente como un infarto? Si la autovía está inaccesible y la carretera a Tolosa colapsada, no hay grandes posibilidades de atender a esa persona».

Las largas colas preocupan a María Fernández. Madre de dos chavales que estudian en Tolosa, realiza diariamente varios viajes a Tolosaldea y Zubieta, donde sus hijos entrenan a fútbol. «No quiero ni pensar el tiempo que vamos a tener que pasar dentro del coche para ir y volver de los entrenamientos». La berastegiarra reconoce que «eso en el mejor de los casos, ya que si las máquinas quitanieves no pueden limpiar la carretera será inviable transitar por ellas». María trabaja además en la villa papelera, por lo que una gran preocupación ronda por su cabeza a la hora de programar la organización familiar. «Esto va a ser un auténtico caos para todos. Los autobuses para que los chavales vayan a clase no van a poder circular y llegar a nuestros puestos de trabajo va a ser una odisea, no solo por cumplir los horarios».

Koro del Castillo trabaja como cuidadora de los pequeños de la escuela de J.A. Muñagorri de Berastegi. Se traslada a diario desde Tolosa a su puesto de trabajo y tiene claro que «para evitar que la carretera se quede colapsada es clave que desvíen los coches desde Irurtzun o Lekunberri». Del Castillo ha ejercido durante varios años como conductora de autobús y la experiencia avala sus palabras al conocer los problemas que se producen en la carretera entre Tolosa y Berastegi. «Teniendo en cuenta que, sin nieve, los días en los que la A-15 ha sido cerrada y se ha desviado el tráfico por aquí ha habido muchos problemas, deberían cuidar muy mucho el volumen de vehículos que accedan a esta vía. Todavía recordamos el caso en el que un estudiante con una diversidad funcional permaneció horas dentro de un autobús en un colapso. Se debería evitar que volviera a producir un suceso así».

La resignación ante el cierre de la A-15 inunda el discurso de Jon Zubillaga. El berastegiarra trabaja en una empresa de Belauntza y reconoce que antes de que se produzca un colapso «lo mejor será quedarse en casa cuando nieve. Poco más podremos hacer».