Vecinos de Hernani hartos: «Deje las fiestas, que parece una adolescente»

Las comunidades de vecinos son fuente de rifirafes debido a la convivencia, a veces en exceso. Los ruidos que interrumpen nuestro sueño a altas horas de la noche suele ser lo más frecuente. Algo que se cae al suelo, un ascensor, pisadas fuertes... o la música a tope.

Hay escenas que recuerdan a un éxito actual como 'Nochentera', single que Vicco ha llevado a las playlist más populares de los servicios de música en streaming y que habla sobre una noche de juerga muy particular. 'Te invito a mi fiesta en mi casa a la una', reza una de las estrofas de su canción, mientras suena una animada melodía de fondo. Sí, todo invita a salir a la pista de baile, darlo todo y dejarse llevar por la música pero… hay un pequeño gran problema: los vecinos no tienen ganas de fiesta. Y es precisamente esto lo que ha enervado a una comunidad de propietarios de Hernani, que se ha plantado ante las ganas de juerga de la vecina del 4ºB durante los fines de semana.

Tal y como se ha hecho eco @LiosdeVecinos, la cuenta de X (antigua Twitter) una vecina con hijos parece haberse convertido en la más popular de un inmueble de esta localidad guipuzcoana. ¿Su pecado? Montar reuniones y celebraciones con constantes toques de bachata, al ritmo de Manuel Turizo, Romeo Santos, Juan Luis Guerra y compañía… y siempre, cómo no, a altas horas de la noche. Ello, lógicamente, redundaba en el descanso y el sueño del resto de propietarios, si no de todos, sí al menos de unos cuantos.

Y estos sufridos vecinos han pasado a la acción. Es por ello que han hecho pública una nota, se supone que está visible en el portal, para que la animada vecina se dé por aludida y deje de montar fiestas… o las haga fuera del inmueble. «Se le rogaría que no realice todos los findes fiestas privadas en su hogar en horario nocturno debido al descanso de los demás vecinos», reza el mensaje. Seguidamente los residentes en la comunidad le piden que tenga un poco de empatía y demuestre la responsabilidad y el buen juicio que se le presupone a una madre: «Deje un poco la bachata y demás música para poder dormir, que parece que usted no es madre de unas criaturas sino una adolecente».

Asimismo, los irritados vecinos también le aconsejan poner cordura y acabar con los ruidos que interrumpen su sueño fin de semana sí y fin de semana también. Y le lanzan una advertencia. «Por favor, controle las subidas y bajadas de sus invitados, si no la próxima vez llamaremos a los municipales por su descontrol. Por favor sepa convivir en comunidad respetando a los demás».

Se desconoce si la queja del vecindario surtirá efecto o no, pero de lo que pocas dudas hay es de que a la señalada vecina no le dará por responder al igual que hizo la protagonista de la canción de Vicco. «'La vecina empieza a picar / Que quiere subirse a bailar / ¡Sube, sube, sube! / Que quiere subirse a bailar / ¡Sube, Mari, sube! / ¡Y súbete hielos, Mari!».