'Cómo superar el duelo' es el título del libro que presenta esta tarde en Donostia el psicólogo clínico Patxi Izaguirre. No es una publicación ... de «autoayuda» y sí de «saber pedir ayuda». De solicitar apoyo para evitar que la pérdida de un ser querido nos aboque a una enfermedad por «un sentimiento de culpa por omisión». Reconocer esos indicadores de riesgo para «cicatrizar las heridas del duelo» es clave para un profesional que aconseja despedirnos de nuestros seres queridos con una receta que contiene cinco puntos: Perdóname. Te perdono. Gracias. Te quiero. Adiós. Poder hacerlo «nos va a facilitar y ayudar el duelo posterior».
-
Fecha y lugar:
Hoy a las 19.00 en la Librería Zubieta, Donostia.
-
Intervienen:
Patxi Izaguirre y Patricia Rodríguez.
– ¿Qué tipo de libro es 'Cómo superar el duelo'?
– Diría que más que un libro de autoayuda es de saber pedir ayuda. La idea del libro surgió como una propuesta para hablar de la muerte y el duelo con un cierto rigor. He aprovechado la oportunidad para irme acercando a diferentes tipos de duelos ya que cuando hablamos de pérdida nos enfrentamos a diferentes abordajes. No es lo mismo una muerte anunciada o una muerte sin avisar de forma traumática. Tampoco son los mismo los suicidios que los duelos desautorizados, como los perinatales, o la pérdida de los hijos en el mismo momento de nacer o pérdidas de desaparecidos.
– ¿Cada tipo de pérdida conlleva duelos diferentes?
– Es verdad que en cada tipo de duelo me voy acercando a características concretas a tener en cuenta. Por ejemplo, alguien que ha perdido a una persona de manera sorpresiva, sin avisar, y está al principio del proceso con una necesidad de ajuste traumático, sí que requiere que nos acerquemos de una forma concreta. Nada que ver con una muerte ya anunciada, que se esté al final del proceso, y donde la comunicación está abierta. Y luego está el sentimiento de culpa. Lo trato en el libro en dos capítulos. Uno sobre los obstáculos más habituales en los procesos de duelo, el sentirnos mal por sentimos bien. Y después, otro en el que abordo las obsesiones. Esa incredulidad de no entender lo que ha pasado y buscamos ponerle un torniquete racional a una hemorragia que es emocional.
«El duelo se puede convertir en una enfermedad , hay indicadores de riesgo que tenemos que valorar»
– Ese sentimiento de culpa y obsesiones. ¿Cómo se tratan?
– En lo que es el sufrimiento psicológico en los duelos, como es algo que no se ve, tendemos a dar consejos sin prospecto o decir que no hay que medicalizar los duelos o el dolor, que hay que naturalizar esta situación. Y no hay una especie de triaje inicial, de valoración inicial para ver si hay riesgos o no. A lo largo del libro intento acercarme con honestidad profesional pero también con honradez personal a valorar el derecho que tiene la persona que sufre el duelo a que algún profesional puede testear ese inicio, qué riesgo puede haber de que vaya a enfermar o complicar su situación, que esa persona no tenga que estar mendigando esa petición de ayuda. A estas personas hay que ayudarlas valorando su situación, ver qué riesgo puede tener, qué recursos propios y entorno tiene y cuál han sido las circunstancias de la muerte para ver si necesita una ayuda plus, más allá de una medicación que pueda necesitar para dormir los primeros días. En definitiva, saber pedir ayuda.
– ¿El duelo se puede convertir en una enfermedad?
– Claro. Hay uno de los capítulos del libro en el que me centro en todo lo que nos está costando vivir en la pandemia. Nos está retratando a nivel social qué y cómo hemos abordado tantas y tantas despedidas que han quedado pendientes, con ese sentimiento de culpa por omisión. Hay indicadores de riesgo que tenemos que tener en cuenta para intentar cicatrizar las heridas de los duelos. Y este ejemplo que te pongo puede valer también para los casos de suicidio.
– Hace hincapié en el libro a cómo decir adiós con el menor sufrimiento posible. ¿Cómo nos preparamos para un momento así?
– Hablo de la importancia de una comunicación honrada. A expresar con honestidad lo que siente quien sabe que va a morir. Quien escucha lo hace activamente y sin cuestionarlo, es decir, valida y no juzga. Ni de forma paternalista ni con distancia y frialdad. Así se pueden dar los cinco pasos para el adiós. Que son 'perdóname por...' y 'te perdono por...'. También dar las 'gracias' por tantas cosas que he aprendido y he compartido contigo en la vida, el 'te quiero' y el 'adiós'. Poder hacer eso antes de la muerte de nuestro ser querido nos va a facilitar y ayudar el duelo posterior.
«Ha provocado que muchas despedidas se hayan quedado pendientes, con ese sentimiento de culpa por omisión»
– ¿Cómo debemos tratar a una persona que está sufriendo en su proceso de duelo?
– A veces lo que intentamos hacer con esas personas es sacarles de donde están y decirles lo que deben hacer. Siempre con mucha verborrea y consejos, como si fuéramos terapeutas. Y a veces esas personas que están mal necesitan sentirse entendidas y atendidas. Yo siempre intento animar a que pidamos ayuda.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.