Accidente mortal en Lezo

«El coche se salió de la curva y chocó contra el vehículo donde iban los cuatro amigos»

En el mismo centro sanitario donostiarra permanece ingresado el ciudadano francés de 21 años que conducía el otro coche, en el que sus dos acompañantes, de la misma edad y nacionalidad, también fueron atendidos en el hospital, al menos uno de ellos en el de Bidasoa en Irun. El conductor se halla a su vez en calidad de detenido, acusado de un delito contra la seguridad vial y otro de homicidio por imprudencia grave, como consecuencia de las primeras pesquisas llevadas a cabo por los agentes de la Unidad Territorial de Tráfico de Gipuzkoa. Al cierre de esta edición, la Ertzaintza no notificó el resultado de las pruebas de alcohol y drogas a las que fue sometido el infractor. No se teme por su vida, y una vez sea dado de alta pasará a disposición judicial. Fuentes de la investigación aseguraron ayer a este periódico que «todo apunta a que «el otro coche se salió en la curva y chocó de frente contra el otro en el que viajaban los cuatro amigos».

En un otoño negro con nueve víctimas en el último mes en la red viaria del territorio, el trágico suceso sembró la conmoción especialmente en la comarca de Oarsoaldea, dado que el domicilio de los dos donostiarras afectados está ubicado muy cerca de Pasai Antxo, de ahí que durante el día de ayer hubiera cierta confusión sobre los municipios de origen de las víctimas.

El accidente tuvo lugar sobre las 3.45 horas de la madrugada, en las inmediaciones del punto kilométrico 3,5 de la GI-636, poco después de la salida del túnel de Altamira en sentido Irun, en el término municipal de Lezo. Concretamente, fue en la curva a derechas situada a la altura de la papelera de Errenteria -prácticamente a la par de la salida de camiones de la fábrica hacia la GI-636-, cuando el BMW 116 en el que circulaban tres jóvenes franceses en sentido Irun se salió en la curva e invadió el carril en el que venían los cuatro jóvenes guipuzcoanos, que se vieron fatalmente sorprendidos por el proyectil rodante que se encontraron de frente.

El impacto fue salvaje, y el Ford Orion con placas de Zamora que conducía Ander, un chaval apasionado de los vehículos clásicos, quedó destrozado. Dados los más de 30 años de antigüedad del coche, este carecía de los sistemas de seguridad más modernos que protegieron su vida a los tres franceses implicados. El joven lezoarra, al que sus allegados describieron ayer como un conductor «prudente y cabal», lo había comprado hace menos de un año y lo había venido remodelando con la intención de participar en exposiciones de este tipo de coches.

Fruto de la fiereza del golpe, los dos turismos quedaron varados en sus respectivos carriles, pero ambos posicionados en el sentido contrario al de su marcha. Los jóvenes guipuzcoanos quedaron atrapados en el interior del habitáculo del Ford, y fue precisa la intervención de los Bomberos para proceder a desencarcelarlos del amasijo de hierros. Hasta nueve ambulancias acudieron al lugar del accidente, dada la gravedad del mismo, con siete jóvenes afectados.

Una vez liberados, el facultativo allí desplazado confirmó el fallecimiento en el acto de Ander e Iñaki, de 22 y 20 años, respectivamente. El resto de los heridos fueron trasladados a los hospitales Donostia y Bidasoa. Saray, residente en la zona de Buenavista, ingresó directamente en la Unidad de Cuidados Intensivos.

Los trabajos de los servicios de emergencia movilizados y las posteriores labores de los agentes de la Ertzaintza para analizar las causas del accidente y elaborar el correspondiente atestado antes de la retirada de los dos coches colisionados, obligó a cortar la calzada durante nueve horas. Entretanto, el tráfico fue desviado en la rotonda de Altamira por la GI-2628 hacia Lezo y Gaintxurizketa, y por la zona de Larzabal en Errenteria en el otro extremo de la variante. Las pesquisas policiales determinaron la detención del conductor del vehículo francés.

Este accidente no fue el único de gravedad registrado la noche del sábado al domingo. Apenas quince minutos después, tres personas fueron trasladadas también al Hospital Universitario de Donostia como consecuencia de otra colisión entre dos vehículos en la GI-20, a la altura de Aritzeta. Según informó el cuerpo de Bomberos de San Sebastián, dos de los heridos debieron ser excarcelados para poder ser evacuados. Una hora antes de la medianoche, otro siniestro, esta vez en la A-15 a la altura de Hernani, se saldó con dos heridos.

Con las dos de ayer, ya son 26 las personas que han perdido la vida en los 23 accidentes mortales registrados en las carreteras de Gipuzkoa en lo que va de año: doce de las víctimas iban en coche, once en moto y tres eran peatones. La lista luctuosa se abrió precisamente en la misma GI-636, también a su paso por Lezo pero en el alto de Gaintxurizketa, donde una joven lezoarra de 18 años fue atropellada por un coche.

El año más trágico de los últimos ocho se ha visto sacudido por un último mes en el que en apenas 29 días se han sucedido hasta nueve fallecimientos en ocho accidentes. El más grave segó ayer dos vidas y dejó en el filo una tercera en una misma cuadrilla de amigos de la zona. Tenían veintipocos años, la misma edad que el conductor temerario que les embistió.