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Las niñas y los niños, primero. De acuerdo. Los más txikis invadieron ayer las calles en el primer día en el que se les permitió ... abandonar el confinamiento. Debieron hacerlo de manera restringida y bajo la vigilancia de un adulto, pero pudieron salir de casa durante un máximo de una hora para alivio de multitud de familias.
Tras el primer gesto del Gobierno central hacia el ansiado inicio de la desescalada, el deporte al aire libre pide la vez para ser la siguiente actividad con la que se abra la mano, como valoran los expertos que asesoran al Ejecutivo de Pedro Sánchez. «Es evidente que cuando llegue el momento en que podamos salir a realizar una actividad física tendremos que respetar varias limitaciones. Pero esa única hora al día -que en principio permitirán- nos va a hacer más llevadero el resto del confinamiento. No solo es el beneficio físico que nos va a aportar, sino también el mental», opina la especialista en preparación física Lide Leibar.
La opinión de esta oiartzuarra graduada en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte por la UPV/EHU y máster en Alto Rendimiento en Madrid, viene a coincidir con la línea que muchos países europeos han mantenido durante el aislamiento para evitar la propagación del coronavirus de sus ciudadanos, a los que permiten practicar al menos una hora de deporte al día. Incluso, la primera ministra belga, Sophie Wilmès, se apresuró desde el primer instante a «recomendar» la práctica deportiva.
Italia, el otro gran foco del Covid-19 en Europa, es el último país europeo en levantar una prohibición que solo mantiene España. En muchos casos, la actividad deportiva está limitada a una hora diaria, cerca de casa y a título individual o, como en Reino Unido o Alemania, junto a las personas con las que se convive. «Cada país habrá aplicado las medidas de la forma que ha creído conveniente en función de la incidencia del virus», asume Lide Leibar. «El único problema -añade- es no respetar las medidas restrictivas de higiene, distancia seguridad...», pero «si se practica de manera consecuente», el deporte «es totalmente recomendable y beneficioso».
En casa
Mantenerse activos No hace falta tener un gimnasio. Una garrafa de aceite, un cartón de leche o el peso corporal bastan como pesas.
Con cabeza Las datos de marcas o tiempos que se publican en redes sociales a veces animan a hacer 'burradas', como tres horas de rodillo.
Inicio al aire libre
Paulatino En casa es fácil trabajar la fuerza, pero no la resistencia si no tenemos una cinta de correr o un rodillo. Así que convendría ir poco a poco.
Principiantes todas aquellas personas que se inicien en el deporte ahora, pueden alternar ratos de carrera a pie y andar.
Deporte para todos
Sin edad: Las personas mayores tienen derecho a hacer deporte, aunque sea caminar.
Lide Leibar lleva la preparación sobre todo de triatletas y corredores de montaña, disciplina de la que procede -también como esquiadora-, pero a su vez diseña planificaciones dirigidas al deporte salud, que es la diana a la que apunta el Gobierno al aligerar el confinamiento. «Hay que ver en qué queda -se pregunta Lide Leibar-. Imagino que será como en otros países. Correr, caminar y bicicleta, aunque hacer esto sin alejarse de casa es complicado, sobre todo pensando en el entrenamiento de un ciclista».
Una de las dudas del Ministerio de Sanidad era si dar vía libre a la caminata a pie llenaría las calles de paseantes, como sucedió ayer con los niños en muchas zonas. Pero Lide Leibar defiende que «una persona mayor también tiene derecho a hacer deporte. Y a su edad probablemente no pueda correr, pero sí andar. Es como todo: debemos ser responsables, porque es la salud lo que está en juego», y más para un sector, el de la tercera edad, más vulnerable con este virus.
Al clausurarse la estación de esquí de Formigal donde trabaja durante la temporada de nieve, Lide Leibar ha regresado al caserío familiar, en Oiartzun. Ahí ha montado «un minigimnasio y un rodillo». Tras seis semanas de confinamiento, «es importante mantenerse lo más activo posible, cada uno a su nivel. El deportista profesional, con su cinta de correr, su ergómetro, su rodillo o sus pesas. Pero cualquiera puede hacer ejercicio en casa con un poco de imaginación, porque una garrafa de aceite o un cartón de leche funcionan como pesas. Incluso hay mil ejercicios para trabajar con el peso corporal. El caso es evitar estar todo el tiempo parados, porque en casa la capacidad de movimiento es reducida».
Leide Leibar es consciente de que el confinamiento ha animado a más de uno a hacer deporte. «Hay mil aplicaciones y vídeos para ello... A muchos les ha dado por comprarse un rodillo, que propicia muchas 'burradas', ya que alguien que hacía salidas de tres horas en bici no puede pasar el mismo tiempo en el rodillo, porque le haría más perjuicio que beneficio. Hay que saber adaptar el esfuerzo a nuestro nivel».
Esto mismo recomienda la entrenadora cuando se pueda hacer algo de deporte al aire libre. «Si no tenemos un rodillo o una cinta, difícilmente habremos podido trabajar la resistencia, por lo que no sería conveniente empezar corriendo ya una hora. Si lo hacemos, castigaremos músculos y articulaciones que no estaban habituadas y es probable que no podamos salir al día siguiente o nos lesionemos. Hay que ir de forma gradual. El deporte es saludable, pero siempre con responsabilidad».
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