
Fue entre los años 1938 y 1959 la mascota no oficial de los niños donostiarras. ¿Quién no subió una o mil veces al parque de ... atracciones de Igeldo para ver a la osa Úrsula?
Publicidad
Desde mayo de 1938 aquella osa permaneció en una jaula a la que acaso nunca se acostumbró. Úrsula fue muy popular, pero se le veía triste y al final se tomó la decisión de trasladarla a un espacio más amplio y mejor aclimatado para ella, el zoo de Barcelona.
Nos acordamos de la osa y de su viaje por una mención tangencial. En la edición de DV del 13 de marzo de 1959 publicaron la carta de un médico donostiarra sin identificar que criticaba la tala de árboles en San Sebastián. Antes de hacerlo, lo relacionaba con un tema de actualidad, elogiando «el proceder de la Sociedad Monte Igueldo, al mandar al hermoso parque de Barcelona a la pobre osa tan aburrida y triste, enjaulada, para que disfrute de más libertad y mejores cuidados que los que hasta ahora recibía. Me parece un acto excelente y perfecto, pero estos días y en el mismo San Sebastián se está cometiendo tal atrocidad, ahora no con animales sino con árboles...».
1959
Llevaba desde la Guerra Civil dando vueltas en una jaula en el parque de atracciones de Igeldo, pero nunca se acabó de aclimatar. Hace 65 años, la popularísima osa Úrsula sería traslada a un lugar mejor, al zoológico de Barcelona.
Rebuscamos y encontramos que la osa Úrsula había sido trasladada semanas antes. En la edición del 22 de febrero de 1959 informaron de ello...
«La 'Ursula', la simpática e imponente osa que todos hemos admirado en Igueldo, ha cambiado de residencia y ha emprendido viaje a Barcelona, donde será acomodada en el Zoo, al que ha sido regalada».
Publicidad
Recordaron entonces que, a pesar de su larga estancia donostiarra, «la osa no se había aclimatado en San Sebastián. La época invernal prestaba su ambiente la fiera, pero el resto del año no le iba. Y por ello la Sociedad Monte Igueldo ha regalado la simpática 'Úrsula' –que tantas veces visitaron los niños donostiarras– al Zoo barcelonés. Y el viaje lo hizo en una jaula especial y por carretera».
Añadían que «echaremos de menos a la fiera, pero ella también tiene derecho a la vida cómoda, a esa vida de fríos glaciares que reclama para subsistir y estar en ambiente. Y en Barcelona le ofrecen un 'hogar' acogedor a varios grados bajo cero incluso. La 'Ursula' se lo merece todo».
Publicidad
Úrsula había llegado a Igeldo el 25 de mayo de 1938. Fue capturada en plena Guerra Civil, marzo de 1937, en montes cercanos a Cangas de Narcea. Algunos miembros del Cuerpo del Ejército de Galicia se hicieron con ella, entonces una osita de apenas dos meses de vida, y la convirtieron en su mascota.
Con aquella unidad militar recorrería la península en guerra, desde Asturias hasta Levante. Pero la osita se fue transformando en osa por el camino. Creció y empezó a hacerse incómoda como mascota. Hasta que el general Aranda decidió donarla al parque de atracciones donostiarra.
Publicidad
La llamativa osa debía de transmitir cierto aire de tristeza, al que se refirieron en un comentario publicado en nuestro diario el 1 de febrero de 1940. «Úrsula está triste... ¿Qué tendrá Úrsula? ¡Ah! ¿Soledad? Imposible, porque son cientos, son miles los curiosos que suavizan su forzoso encierro con palabras cariñosas, amén del goloso regalo de alguna manzana camuesa. ¿Añoranza? Tal vez».
Suscríbete los 2 primeros meses gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.