Un hombre abraza a una mujer en una residencia guipuzcoana. IÑIGO ROYO
El árbol de la ciencia

Mirada literaria a la demencia

A fin de año pueden llegar noticias positivas sobre terapias que pueden cambiar el curso del alzheimer

Domingo, 11 de septiembre 2022

Cien años de soledad' es la novela culmen del realismo mágico, el movimiento literario más relevante de Latinoamérica en el siglo XX. Su autor, Gabriel García Márquez, situó la acción en Macondo, el pueblo ficticio de la familia Buendía. La vida transcurría en una feliz ... e intrascendente rutina hasta que se vio sacudida por la llegada de la plaga de insomnio. Inicialmente fue recibida con entusiasmo por los vecinos, pues no dormir dejaba mucho tiempo libre. Pero, en pocas semanas, el insomnio dio paso a un monumental aburrimiento y a algo mucho más dramático: el olvido. A medida que las noches en blanco aumentaban, la pérdida de memoria era más evidente. Para superar la situación, Aureliano Buendía colgó notas con el nombre de los objetos (reloj, puerta, mesa). Sin embargo, con la acelerada progresión del olvido, el nombre solo no bastaba para identificar las cosas. Aureliano confeccionó apuntes más informativos, como «Esto es una vaca. Debe ser ordeñada para que dé leche y la leche recogida debe ser hervida para combinarla con café y hacer un café con leche». El padre de Aureliano, José Arcadio, construyó una máquina de la memoria, un aparato rotatorio con miles de notas en sucesión que cada mañana le recordaba el conocimiento adquirido a lo largo de su vida. La plaga amenazó con destruir Macondo hasta que un gitano llamado Melquiades llegó al pueblo con una poción restauradora de la memoria.

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En una dramática ironía del destino, García Márquez sufrió alzheimer al final de su vida. Como los cerca de 50 millones de personas afectadas en el mundo, no tuvo la oportunidad de probar la poción mágica de Melquiades para curar la enfermedad que te sumerge en el universo del olvido. Tal vez ya sabía de Yarumal cuando escribió la historia del clan Buendía. Yarumal es un municipio de la Antioquía colombiana con la mayor incidencia de alzheimer del mundo. Cientos de miembros de 25 familias sufren una forma de alzheimer precoz y agresivo y 6.000 personas de diferentes ramas del linaje la padecerán en el futuro. La causa es una mutación genética que propicia el acúmulo de basura proteica conocida como amiloide. La evidencia científica derivada del estudio de estas familias es un soporte relevante de las terapias experimentales basadas en la limpieza de los depósitos de amiloide del cerebro, con cuatro de las cuales trabajamos. Hasta ahora, los resultados muestran discrepancias que buscan explicación y han superado un escándalo por fraude causado por desaprensivos con afán de lucro. Las Agencias evaluarán los nuevos fármacos en Navidad. Ojalá que esta versión científica de la poción de Melquiades sea el regalo que todos esperamos.

Cervantes describió con maestría la demencia por cuerpos de Lewy que asoló el cerebro de Don Quijote. La pérdida de facultades cognitivas y mentales, las alucinaciones, el trastorno de conducta en fase REM (despertares violentos para defenderse de amenazas soñadas) y los desmayos que afectaron al hidalgo manchego son síntomas característicos de esta dolencia. Es distinta del alzheimer, pero el drama personal y familiar es idéntico. La memoria también fue protagonista de varios relatos del argentino Jorge Luis Borges. El más conocido en el ámbito médico es 'Funes el memorioso', un gris y humilde funcionario de prodigiosa memoria y triste vida porque la incapacidad de olvidar le impedía pensar y disfrutar de otras habilidades cognitivas. En 'La memoria de Shakespeare', Borges narra la historia de Hermann Sörgel, un profesor de Literatura a quien un colega le ofrece la memoria de Shakespeare. Sörgel pensó que era una oportunidad única para acceder al pensamiento íntimo del dramaturgo. Sin embargo, tras la fascinación inicial, Sörgel comenzó a confundir sus recuerdos con los de Shakespeare y a perder su identidad. La ocasión afortunada se convirtió en una pesadilla terrorífica. Al fin y al cabo, la identidad personal depende de la memoria. Auguste Deter, primera paciente con alzheimer, lo resumió en una pregunta retórica «¿Qué puede haber peor que perder a uno mismo?».

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